SANÁ, Yemen. El expresidente de Yemen Alí Abdalá Saleh murió durante los combates en la capital, Saná, pocos días después de que se rompiera su alianza con los insurgentes hutíes, confirmó una dirigente de su partido.
“Cayó como un mártir defendiendo la República”, declaró Faika al Sayed, una miembro del comité central del partido del exmandatario, el Congreso Popular General (CPG), atribuyendo su muerte a los hutíes.
Sayyed dijo que Saleh, de 75 años, y otros altos responsables del CPG fueron alcanzados por los disparos de los hutíes cuando abandonaban la capital yemení, bajo control de estos rebeldes, para dirigirse a zonas en manos de sus propias fuerzas.
Milicianos hutíes bloquearon un convoy de cuatro vehículos a unos 40 km al sur de Saná y mataron a Alí Abdalá Saleh, así como al secretario general del CPG, Arif Al Zuka, y a su adjunto Yasir Al Awadi, declaró una fuente militar anónima.
Según el texto, “el ministerio de Interior (controlado por los rebeldes) anuncia el fin de la milicia de la traición y la muerte de su jefe (Alí Abdalá Saleh) y de un número de sus partidarios criminales”.
El lunes en Saná, persistían intensos combates entre los partidarios de Saleh y los rebeldes hutíes, apoyados por Irán.
Ambos bandos se aliaron hace tres años para arrebatar el control de la capital al gobierno reconocido internacionalmente. Su alianza saltó en pedazos la semana pasada, en medio de enfrentamientos entre las dos facciones y acusaciones de traición.
Tras la ruptura del acuerdo, Saleh se dijo dispuesto a “pasar página” y a dialogar con los sauditas, sus enemigos en estos últimos años.
RECONQUISTA
Aprovechando el caos en la capital, el presidente yemení, Abd Rabbo Mansur Hadi, cuyo gobierno opera desde Adén, decidió actuar e intentar reconquistar la ciudad.
La operación anunciada este lunes, llamada “Saná la árabe”, consistiría en tomar la capital desde diferentes frentes, principalmente el este y el noreste, según este miembro del entorno de Hadi.
La coalición árabe liderada por Arabia Saudita exhortó a los civiles de Saná, la capital de Yemen, de alejarse de las zonas rebeldes, informó este lunes el canal de televisión saudita Al Ekhbariya.
Los civiles deben mantenerse “a más de 500 metros” de las zonas controladas por los rebeldes hutíes apoyados por Irán, indicó el canal de televisión.
Esa información podría significa que la coalición se prepara a intensificar los ataques aéreos en Saná, controlada por los rebeldes desde hace tres años.