KIEV. El primer ministro británico, Boris Johnson, se reunió en Kiev con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en una visita sorpresa destinada a mostrar “solidaridad” con el país que enfrenta desde hace seis semanas una invasión de tropas rusas.
Johnson prometió ayuda militar adicional a Ucrania en forma de vehículos blindados y misiles antibuques, durante una visita a Kiev, donde calificó las matanzas en las ciudades ucranianas de Bucha e Irpin como “crímenes de guerra”.
El nuevo envío de ayuda militar está compuesto por 120 vehículos blindados y nuevos sistemas de misiles contra navíos “para ayudar a Ucrania en esta fase crucial, mientras continúa la ofensiva ilegal de Rusia”, dijo Johnson, en un comunicado difundido por Downing Street.
Esto se suma a la entrega de armamento que su gobierno anunció el viernes, compuesta por misiles antiaéreos Starstreak, 800 misiles antitanques, drones “merodeadores” para “ataques de precisión”. En respuesta, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, afirmó el sábado que “el resto de países deben seguir el ejemplo” del Reino Unido.
Además, al tiempo que los líderes occidentales están colectando fondos para ayudar a Ucrania, Johnson afirmó que le entregaría otros 500 millones de dólares a través del Banco Mundial.
El primer ministro británico declaró que fue un “privilegio” conocer en persona a Zelenski, durante una visita a Kiev que no fue anunciada por el gobierno británico y en el que aprovecharon para caminar por las calles de la capital que fueron bombardeadas por las milicias rusas.
Europa manifestó así su firme apoyo al presidente de Ucrania, no solo con la visita del premier británmico, también contaron con las visitas de varios dirigentes a Kiev, suministros de armamento pesado, ayuda para investigar los “crímenes de guerra” y promesas de un pronto ingreso en la Unión Europea (UE).
También viajó a Kiev el primer ministro austriaco, Karl Nehammer, quien recordó que su país es neutral desde el punto de vista militar, pero no puede mantenerse al margen cuando se producen “crímenes de guerra”.
Nehammer subrayó que Viena apoyará el endurecimiento de las sanciones “en el marco de la UE mientras la guerra no cese” y advirtió a Moscú que el quinto paquete “no será el último”.
Además de ofrecerse a acoger más refugiados y abrir corredores humanitarios para evacuar a la población de la sitiada ciudad portuaria de Mariúpol, informó a Zelenski que visitará la localidad de Bucha, cerca de Kiev, donde supuestamente las tropas rusas mataron sumariamente a cientos de civiles.
Previamente, Zelenski recibió al primer ministro eslovaco, Eduard Heger, que anunció el suministro a Ucrania de un sistema con misiles antiaéreos de largo alcance S-300 de fabricación rusa.
El líder ucraniano agradeció a Heger el apoyo “no sólo de palabra, sino con hechos”, y describió como “histórico” el envío de armamento pesado en medio de la “agresión” rusa.
“Esperamos que este sistema pueda ayudar a salvar la mayor cantidad posible de ucranianos inocentes de la agresión de (el presidente ruso, Vladímir) Putin”, aseguró Heger.
Un día antes, el presidente ucraniano también recibió garantías de que el camino del ingreso en la UE está allanado.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, le entregó el viernes un formulario con preguntas que el líder ucraniano prometió responder “en el plazo de una semana”.
Ucrania, que solicitó la adhesión el 28 de febrero, debe respetar los valores fundamentales del bloque, contar con instituciones democráticas y una economía de mercado.
Según informó el Gobierno ucraniano, Kiev espera recibir el estatus de candidato al ingreso en junio, proceso que quiere agilizar como parte “de la victoria sobre el agresor ruso, que quiere interrumpir el rumbo democrático de Ucrania”.
RECAUDACIÓN DE FONDOS
Por otro lado, la campaña mundial de donación de fondos para los refugiados de Ucrania logró recaudar un total de 10 mil 100 millones de euros.
“Hoy hemos recaudado millones de euros para las personas que huyen de la invasión, dentro y fuera de Ucrania. Y llegarán más. Seguiremos prestando apoyo.
Y una vez que las bombas hayan dejado de caer, ayudaremos al pueblo de Ucrania a reconstruir su país”, anunció la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, en Twitter.
A estos fondos recaudados en el marco de la iniciativa “Stand Up For Ukraine”, la CE, junto con el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo aportan otros mil millones.
De las ayudas procedentes de la CE, 600 millones “se destinan a Ucrania, a las autoridades ucranianas y en parte a Naciones Unidas”, y los otros 400 millones van a “los Estados en primera línea, que están haciendo un trabajo tan excelente y que ayudan a los refugiados que llegan”, precisó Von der Leyen.
Canadá anunció por su parte, medidas para facilitar la llegada de refugiados ucranianos y se comprometió a entregar 79.5 millones de dólares estadounidenses suplementarios en ayudas a Ucrania y los países vecinos.
Este monto adicional, que se utilizará para atención médica de emergencia y necesidades básicas, fue anunciado por el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, durante la recaudación de fondos internacional Stand Up for Ukraine, que realizó junto con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Finalmente, la evacuación de civiles del este de Ucrania prosiguió con el amenazador retumbar de disparos de artillería que llegaba de la línea de frente, un día después del bombardeo de la estación de trenes de Kramatorsk.
Varios minibuses y camionetas llegaron a buscar a decenas de personas que sobrevivieron al bombardeo y que pasaron la noche en una iglesia protestante del centro de la ciudad, cerca de la estación bombardeada, constataron periodistas.
El alcalde de la ciudad de Lysychansk, Oleksandr Zaika, urgió a los pobladores a evacuar ante el bombardeo ruso. Con información EFE y Europa Press