Cientos de activistas prodemocracia bloquearon este domingo algunas rutas al aeropuerto de Hong Kong, mientras la ciudad se iba recuperando de una noche de violentas protestas en las que hubo fuego, gas lacrimógeno y palizas de la policía.
Cientos de jóvenes inconformes con el gobierno ingresaron por varias entradas del aeropuerto, provocando duros enfrentamientos con policías en varias áreas.
Los operadores del tren "Airport Express" dijeron que habían suspendido los servicios el domingo por la tarde, mientras los protestantes, escondiéndose de las cámaras de vigilancia bajo paraguas, construían barricadas en la estación de buses del aeropuerto y trataban de detener el tráfico en la principal carretera que lleva a las terminales.
Fuera de una de las terminales del hub internacional, los manifestantes pusieron extintores de incendios y amontonaron carritos para equipaje para crear nuevas barricadas al tiempo que rompían cámaras de vigilancia.
A pesar de los intentos de las fuerzas de seguridad de frenar su avance al aeropuerto, un grupo de manifestantes enmascarados logró ingresar esta tarde a la planta baja de la Terminal 1, destrozando una puerta de vidrio, que fue cerrada por las autoridades del aeropuerto para bloquearlos.
Desde junio, las protestas pacíficas se han transformado en manifestaciones, a veces violentas, como las registradas la víspera en varios puntos del territorio autónomo chino, en las que manifestantes radicales provocaron incendios en diferentes lugares y destrozaron las instalaciones del metro.
Con información de EFE