Los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU se reunieron en persona en la sede de Naciones Unidas para discutir varias cuestiones, en el primer encuentro físico que el máximo órgano ejecutivo de esta organización celebra desde el pasado 12 de marzo.
El embajador permanente de Alemania en la ONU, Christoph Heusgen, que preside el consejo durante el mes de julio, aseguró que se trata del comienzo de un regreso "gradual" de la actividad de este órgano dada la situación en la ciudad de Nueva York, que se encuentra en la fase tres de la reapertura.
"Los encuentros virtuales no pueden realmente reemplazar a la diplomacia en persona", dijo Heusgen a la prensa antes de la reunión, en la que insistió ante sus colegas sobre la importancia de los encuentros entre diplomáticos en los márgenes de las reuniones.
El encuentro, en el que se trataron entre otros temas el conflicto en el Yemen y la paz en Colombia, se realizó manteniendo las distancias de seguridad y Heusgen apuntó que una vez terminada la jornada se reunirá con todos los miembro para evaluar sus reacciones y estudiar la posibilidad de celebrar nuevas citas presenciales.
En declaraciones a la prensa, el embajador alemán aseguró que no tenía planes concretos para retomar la actividad en la sede de Nueva York, pero subrayó que su intención es celebrar en las próximas dos semanas más citas como esta.
Esta reunión se produce después de una dura semana de negociaciones virtuales, en la que los 15 miembros del Consejo de Seguridad discutieron la renovación de dos pasos transfronterizos de ayuda humanitaria al noroeste de Siria, el último bastión de los rebeldes sirios.
Tras cuatro votaciones virtuales en las que China y Rusia vetaron dos propuestas de Alemania y Bélgica y en las que dos iniciativas rusas no lograron los apoyos suficientes, finalmente los quince países acordaron un acuerdo de compromiso por el cual se mantendrá abierto sólo uno de los dos pasos de ayuda por un periodo de doce meses.