A octubre de este año, el 24 por ciento de los estadounidenses de extracción republicana refirieron ver a Donald Trump con mucha o algo de "frialdad", es decir, no lo apoyan. De acuerdo con think tank Pew Research, al cierre de su presidencia este grupo era de apenas 14 por ciento. Según la organización, el mayor rechazo hacia el magnate entre los republicanos viene de aquellos moderados, con estudios universitarios y sin profesar una religión.