La Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) en Estados Unidos tiene detectados, de 2019 hasta el cierre de 2023, 649 laboratorios clandestinos para la fabricación de drogas ilícitas en territorio estadounidense.
En reiteradas ocasiones el gobierno de EU ha presionado a autoridades mexicanas para frenar la producción y tráfico de fentanilo, que aseguran, llega a su territorio directamente desde México. Sin embargo, según la misma DEA, en el otro lado de la frontera también se fabrican drogas químicas.
La DEA, en su Registro Nacional de Laboratorios Clandestinos, informa haber detectado 649 laboratorios de droga de 2019 a 2023. Según la página oficial de la agencia estadounidense: “organismos encargados de la aplicación de la ley encontraron sustancias químicas u otros artículos, lo que indica la presencia de laboratorios clandestinos de drogas”.
Según la información oficial, Texas y California —ambos estados colindantes con México en la frontera— son los territorios en los que más laboratorios clandestinos se han detectado en operaciones.
No obstante, en zonas más alejadas del país como Minnesota, Michigan, Nueva York, Pennsylvania o Washington también se ha registrado presencia de estos centros de fabricación ilícita de drogas químicas.
En abril del 2023, durante una conferencia de prensa del Departamento de Justicia estadounidense, autoridades de EU advirtieron que “el fentanilo es la mayor amenaza para los estadounidenses hoy en día”. Por ello, anunciaron un operativo contra Los Chapitos, célula criminal del Cártel de Sinaloa.
“En la DEA decidimos atacar proactivamente a la red criminal responsable del
fentanilo que inunda nuestras comunidades. Analizamos nuestros datos y la respuesta era clara: la mayor parte del del fentanilo en Estados Unidos procede del cártel de Sinaloa”, expusieron.
Se aseguró que los hijos de ‘El Chapo’ Guzmán fueron pioneros en la fabricación de fentanilo y son responsables de la entrada masiva de fentanilo en los Estados Unidos. Además, aseguraron que la base de operaciones es México.
“México, donde los Chapitos dirigen laboratorios secretos, transforman precursores de fentanilo en polvo y pastillas de fentanilo, y lo introducen de contrabando en Estados Unidos por tierra, aire, mar y túneles subterráneos”, se lee en la información de aquella conferencia.
Por su parte, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aceptó, tras cinco años de gobierno, que en nuestro país se fabrica dicha sustancia; aunque también contradijo a autoridades estadounidenses al asegurar en entrevista a un medio internacional.
“No tienen toda la información, porque el fentanilo también se produce en Estados Unidos (...) El fentanilo se produce en Estados Unidos, Canadá y México. Y los precursores químicos proceden de Asia”, informó el mandatario.
Inclusive, arremetió contra la sociedad estadounidense:
“¿Sabes por qué no tenemos el consumo de drogas que tienes en Estados Unidos? Porque tenemos costumbres, tradiciones y no tenemos el problema de la desintegración de la familia”, apuntó López Obrador.