La delegación olímpica de Afganistán desfiló sobre el río Sena, en París, ondeando la bandera de la República Islámica, representativa del país asiático previo a la toma de poder del régimen islamista del Talibán, un acto considerado como protesta contra el gobierno autoritario y represivo contra las mujeres.

En agosto de 2021, el régimen talibán regresó al poder tras 20 años de ser derrotados y derrocados como parte de la guerra contra el terrorismo encabezada por Occidente, y con su retorno impuso una bandera diferente a la establecida ante la comunidad internacional.

Durante 20 años de un gobierno como República Islámica de Afganistán, los talibanes se deshicieron de todos los símbolos que representó al país incluida la bandera, que está diseñada por tres bandas verticales de color negro, rojo y verde, que representan el pasado, la lucha independentista y el progreso, ademas del escudo nacional en color blanco.

Esta bandera fue la oficial durante casi 20 años de gobierno de la República donde mostró diversas aperturas sociales, sobre todo a favor de las mujeres, en las que se les brindó garantías a sus derechos humanos y civiles y lograron diversos emprendimientos, como el retorno de las niñas y adolescentes a las escuelas, o puestos políticos para las mujeres.

Sin embargo, con el retorno del Talibán al gobierno en 2021, uno de los primeros cambios fue la retirada de la bandera de la República Islámica y la instauración de la insignia del Emirato Islámico con el símbolo talibán, que consta de una bandera en blanco con la shahāda (profesión de fé islámica) en color negro, adoptada de forma oficial por el gobierno islámico el mismo día de su declaración institucional, el 15 de agosto, cuando cayó la capital Kabul durante una contraofensiva del grupo fundamentalista que instauró su gobierno teocrático el 8 de septiembre de 2021.

Con esta declaración, los talibanes volvieron a quitar progresivamente los derechos a las mujeres, hicieron obligatorio el uso del velo en público y se les prohibió participar en las actividades de gobierno y sociales, incluidas las actividades deportivas.

La actual delegación deportiva de Afganistán que participa en los Juegos Olímpicos de París no fue autorizada por el gobierno Talibán, mucho menos la participación de mujeres en las actividades deportivas. Por esta razón, el equipo olímpico afgano decidió desfilar con la anterior bandera de la República Islámica como símbolo del respeto a los derechos de las mujeres previo a la llegada del régimen del Talibán.

Cabe destacar que los deportistas del equipo de Afganistán se encuentran en calidad de refugiados, ya que huyeron del país durante diversos procesos políticos de la nación asiática.