El diario venezolano Panorama publicó este martes su última edición impresa tras 104 años de circulación, al verse asfixiado por la falta de papel, una suerte que ha corrido casi toda la prensa escrita local en medio de la crisis política y económica.
"Tratamos de prorrogar la existencia de nuestro papel. Pero, pese a tanto esfuerzo, hoy, con el corazón arrugado, tenemos que presentarles nuestra última edición impresa", reseñó en su editorial el medio más antiguo del estado Zulia.
De línea independiente, Panorama era el único medio impreso que sobrevivía en Zulia, región afectada desde hace una década por apagones energéticos que recrudecieron el pasado 7 de marzo, contrayendo aún más la economía de la otrora próspera zona petrolera.
"Antes de llegar aquí hemos batallado en la búsqueda de divisas para los insumos necesarios (todos importados: planchas, tinta y el costosísimo papel). También hemos soportado el terrible peso de la crisis económica que sacude al país y que según calcula el FMI finalizará el año con una hiperinflación del 10.000.000%", subrayó el medio.
El cierre de 75% de los comercios de Zulia en el último año, según cifras de la patronal Fedecámaras, provocó una caída abrupta de la pauta publicitaria en el diario, que ya había limitado la cantidad de ejemplares en circulación y se enfocará en su versión web.
Migración a plataformas digitales
"Nos tocará migrar a las plataformas digitales, reinventarnos para seguir informando y así vencer los obstáculos", declaró a la AFP Deivis Rodríguez, editor de política y economía con más de 15 años en la empresa.
Panorama asegura que sus finanzas también se deterioraron por los continuos aumentos salariales decretados por el gobierno de Nicolás Maduro que, a su juicio, apenas han servido de "combustible a la inflación" y no toman en cuenta la "capacidad de la empresa privada para hacerles frente".
Desde 2013, más de un centenar de medios cerraron en Venezuela, entre estos 70 periódicos. Ese año fue creado el Complejo Editorial Alfredo Maneiro, una corporación estatal que monopoliza el manejo del papel y a la que un sector de la prensa acusa de actuar con sesgo político.
En diciembre de 2018 dejó de circular la edición impresa de El Nacional, emblemático diario fundado en 1943 por el literato venezolano Miguel Otero Silva. También cerró -en diciembre de 2016- El Impulso, el más antiguo de Venezuela con 114 años.