Washington.- El presidente Donald Trump aseguró en su tercer discurso anual del Estado de la Unión que para principios del próximo año el muro fronterizo con México tendrá más de 800 kilómetros construidos.
“Ya hemos completado más de 100 millas (165 kilómetros) y habrá más de 500 millas (805 kilómetros) a principios del próximo año”, sentenció el mandatario sobre su proyecto bandera para combatir la entrada de inmigrantes indocumentados por la frontera sur de EU.
Al respecto, también celebró que el paso de inmigrantes hacia su país desde México ha disminuido un 75% desde mayo pasado, como resultado de los “esfuerzos sin precedentes” de su administración.
“A medida que el muro sube, las incautaciones de drogas aumentan y los pasos fronterizos disminuyen”, dijo el mandatario, al destacar los “históricos” acuerdos de cooperación con los gobiernos de México, Honduras, El Salvador y Guatemala.
En un discurso que más bien pareció un mitin electoral, ante republicanos que aplaudían cada una de sus palabras y con los legisladores demócratas petrificados en sus asientos, el presidente estadounidense enumeró los supuestos logros de su gobierno en materia económica.
Desastroso TLC
Entre el empleo histórico para afroamericanos, hispanos, mujeres jóvenes y veteranos del Ejército, así como los recortes de impuestos, Trump también defendió el nuevo tratado de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC) como un gran logro de su gobierno para acabar con el “desastroso” TLC.
“De hecho, el comercio injusto fue una de las principales razones por las que me postulé a la presidencia”, afirmó el mandatario ante los aplausos y gritos de euforia de republicanos.
Guaidó en el Congreso
El líder opositor venezolano Juan Guaidó fue uno de los tantos invitados sorpresa de Trump, ante el cual prometió “aplastar la tiranía” chavista.
“Con nosotros en la galería está el presidente legítimo de Venezuela, Juan Guaidó”, afirmó Trump. Guaidó se puso de pie al escuchar la mención de Trump y saludó al presidente y a los 535 miembros de ambas cámaras del Congreso.
El homenaje de Trump a Guaidó fue recibido con una multitudinaria ovación, con los aplausos de la presidenta del Congreso, la demócrata Nancy Pelosi. “Maduro es un dirigente ilegítimo, un tirano que trata con brutalidad a su pueblo. Pero su mandato de tiranía quedará aplastado y roto”, garantizó.
Pelosi rompe discurso
En política exterior, Trump tendió la mano a Irán, al afirmar que las relaciones entre ambos países sólo depende de Teherán, y reiteró su promesa de retirar las tropas de Afganistán.
El discurso tuvo un fuerte componente militarista, al celebrar la inversión en armamento para combatir, entre otras cosas, “el socialismo”.
Al final del discurso, Nancy Pelosi, que escuchó impasible a Trump por más de una hora, rompió el discurso del presidente ante todo el Congreso.