RIAD. En lo que fue su última cumbre del G20 antes de dejar la presidencia, Donald Trump se dedicó a dinamitar el multilateralismo y afianzar su legado aislacionista ante sus simpatizantes y en contra de las posturas del próximo mandatario de Estados Unidos, Joe Biden.
Sus blancos para confrontar la celebración de los líderes del G20 sobre el regreso del multilateralismo con el próximo presidente estadounidense, fueron el Acuerdo de París sobre el cambio climático y el Tratado de Cielos Abiertos, que se creó para evitar una guerra.
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Trump dedicó la última intervención de su Presidencia en el foro del G20 a condenar duramente el Acuerdo de París sobre el clima del que su país se retiró bajo su mandato, pero al que su sucesor, Joe Biden, ha prometido regresar el primer día de su llegada al poder.
Trump participó por vía telemática en un acto sobre cómo salvar al planeta de la crisis climática en el marco de la cumbre del G20, organizada por Arabia Saudita y que terminó ayer.
En un breve discurso grabado en la Casa Blanca, el mandatario defendió su gestión en temas medioambientales, muy criticada por activistas contra la crisis climática, y se dedicó sobre todo a reivindicar su decisión de desvincular a su país del Acuerdo de París de 2015.
“Retiré a EU del injusto y unilateral Acuerdo Climático de París, muy injusto para Estados Unidos. El Acuerdo de París no fue diseñado para salvar el medio ambiente. Fue diseñado para matar la economía estadounidense”, afirmó Trump.
“Me niego a entregar millones de empleos y a enviar billones de dólares estadounidenses a los peores contaminadores y transgresores ambientales del mundo, y eso es lo que hubiera sucedido”, añadió.
Me niego a entregar millones de empleos estadounidenses y a enviar billones de dólares a los peores contaminadores y transgresores ambientalesDonald Trump
Trump rescataba así su denuncia de que los compromisos de París no fueron tan estrictos para países contaminantes como China o India, un argumento que esgrimió cuando anunció que Estados Unidos se retiraría del pacto, en junio de 2017.
La retirada del pacto de EU se hizo efectiva la medianoche del pasado 4 de noviembre, en plena velada electoral, y tres días antes de que los principales medios de comunicación proyectaran que, de acuerdo con el recuento en los estados clave, Biden había ganado los comicios y negado a Trump un segundo mandato.
Por otra parte, Estados Unidos se retiró oficialmente ayer del Tratado de Cielos Abiertos, un acuerdo multilateral para garantizar la transparencia en cuanto al control de armas que ha sido clave en la seguridad europea, tras acusar a Rusia de “pervertir” el pacto.
Seis meses después de que Trump anunciara su decisión de romper con el tratado, la retirada de Estados Unidos se hizo oficial ayer, confirmó el Departamento de Estado en un comunicado.
Ese acuerdo de la Organización de Seguridad y Cooperación Europea (OSCE), en vigor desde 2002, permite a sus 34 Estados miembros sobrevolar cualquier parte del territorio del resto de participantes, fotografiando desde el aire, con el objetivo de asegurar que sus vecinos o rivales no preparan ataques militares y evitar una guerra accidental.