La salud sexual y los métodos anticonceptivos son aún tema tabú en muchos hogares latinos de EU., razón por la que en 2014 nació Raíz, un proyecto de Planned Parenthood que busca crecer este año de cinco estados del sur a diecinueve a través del país.
En algunos estados, como Arizona, la educación sexual no aparece en los currículos escolares y queda a expensas de las familias, que en muchos casos no tienen el tiempo o el conocimiento para hacerse cargo de esta tarea o incluso piensan que no es apropiado hablar de ello.
"Mi mamá nunca habló conmigo de eso, lo veíamos como algo solo de güeros (blancos)", reconoció a Efe Alejandra Sánchez, una joven mexicana indocumentada y criada en Utah que conoció Planned Parenthood cuando estudiaba la escuela superior y buscaba la forma de conseguir píldoras anticonceptivas.
Años después, Sánchez se ha incorporado a Planned Parenthood, la mayor red de clínicas de salud sexual y reproductiva de EU, como responsable de relaciones con la comunidad latina.
Desde su posición, la joven defiende la importancia de que toda la información sobre salud sexual esté en español y que en la plantilla de organizaciones como la suya haya trabajadores de origen hispano, especialmente en los puestos de poder.
Autodidactas
Algo similar le ocurrió a María Valle Coto, de origen salvadoreño, que conoció a Planned Parenthood como paciente y ahora trabaja como responsable de Raíz en el estado de Illinois.
Fue allí donde le explicaron las causas y efectos secundarios del método anticonceptivo que había elegido, algo que su médico no le había contado.
Admite que adquirió su educación sexual de forma autodidacta a través de la web de Planned Parenthood y que, tras meses implicada en la organización, ha comenzado a hablar con su madre de estos temas, que nunca antes habían tratado, como muchas familias latinas.
Mi madre se crió con esa idea de que todo tipo de educación reproductiva era mala y que no era mi derecho de saber eso, sino el de mi esposo cuando nos casáramos
María Valle Coto, migrante de El Salvador
Las dos jóvenes se encuentran estos días en Detroit, donde 2 mil voluntarios de Planned Parenthood -300 de ellos latinos- viajaron para aprender a organizar campañas electorales con la vista puesta en las elecciones legislativas de noviembre.
Defensa de derechos reproductivos de mujeres
"Esta es la primera oportunidad, desde que ganó Donald Trump, de recuperar algo de equilibrio y elegir a defensores de los derechos reproductivos de las mujeres", reivindicó la directora política de Planned Parenthood, Deirdre Schifeling, quien confía en que los demócratas puedan obtener una mayoría en ambas Cámaras legislativas.
Schifeling quiere conseguir una victoria demócrata para lograr tres objetivos: frenar la desmantelación de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, conocido como Obamacare, y la supresión de los fondos a Planned Parenthood.
Esa agenda incluye además blindar el acceso al aborto ante un posible revés de la Corte Suprema y acabar con la nueva ley de reforma de Título X, conocida como "ley mordaza".
Esta nueva ley pretende que organizaciones que realizan abortos, como Planned Parenthood, no puedan recibir fondos de Título X, el único programa federal que financia la salud sexual de personas con pocos recursos y sin seguro médico.
La directora política de la organización cree que en los próximos comicios, la comunidad latina es "crucial" para alcanzar una victoria demócrata, y celebra que el proyecto Raíz "está teniendo mucho más éxito en llegar a esos votantes con los que los partidos tradicionales no consiguen conectar".
"Es un momento crítico para los derechos reproductivos de las mujeres y sabemos que cada vez que se producen ataques al sistema de salud, impacta sobre todo a las mujeres de color, el colectivo LGTBQ y las personas con bajos ingresos", resumió la vicepresidenta ejecutiva de Planned Parenthood, Dawn Laguens.
Laguens alertó de los ataques "hostiles" del Departamento de Salud al sistema de prevención de embarazos adolescentes, "intentando convertirlo en un programa de abstinencia sexual".
Lamentó que la Administración de Trump haya eliminado de su web información sobre temas como el cáncer de mama o la no discriminación por identidad sexual.