WASHINGTON. Estados Unidos sacó de Rusia en 2017 a un informante de la CIA que tenía acceso al círculo cercano de Vladimir Putin en el Kremlim, según varios medios de comunicación.
La fuente, que había estado proporcionando información durante décadas, confirmó supuestamente el papel directo de Putin en la injerencia de Moscú en las presidenciales estadounidenses que dieron la victoria a Donald Trump en 2016, indicaron CNN y The New York Times.
La cadena televisiva dijo que el espía fue sacado de Rusia en 2017 debido a la preocupación de que Trump o su gabinete pudieran exponerlo ante un reiterado mal manejo de información clasificada.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, que era director de la CIA en 2017, cuestionó esos reportes de prensa sin rechazarlos totalmente. "He visto esa información. Esa información es materialmente imprecisa", declaró en la Casa Blanca.
"Como exdirector de la CIA, no suelo hablar de cosas como ésta. Sólo (...) cuando la información es tan atroz que puede crear un riesgo para EU, comento las cosas como acabo de hacerlo", añadió.
Medios rusos identificaron al informante como Oleg Smolenkov, un asesor del mayor consejero de Putin en política extranjera, Yuri Ushakov. Smolenkov trabajó también en la embajada rusa de Washington, según esas informaciones.
Su posición en el Kremlin podría haberle dado acceso a información de seguridad de alto nivel y dio probablemente datos importantes sobre Putin a la CIA, según expertos en inteligencia.
"Si esos reportes son ciertos, creo que se trata realmente de una enorme victoria por parte de la CIA", dijo el exportavoz de la agencia de inteligencia Ned Price.
Su exfiltración sería "una pérdida estratégica" para Estados Unidos, añadió.
Moscú intentó ayer quitarle importancia a la noticia. El portavoz de Putin, Dmitri Peskov, dijo que el hombre trabajó en el Kremlin pero había sido despedido y no tenía contacto directo con el líder ruso.
"No sé si fue un agente o no. Sólo puedo confirmar que trabajó en la administración pero fue despedido hace algunos años", dijo. "Su puesto no era de los de más alto nivel (...) y no preveía ningún contacto con el presidente", añadió Peskov.
Según el New York Times, el informante era el activo ruso más valioso de la CIA, y su extracción "cegó efectivamente" a la inteligencia estadounidense sobre el funcionamiento interno del Kremlin durante las elecciones de medio término en EU de 2018, así como para las próximas elecciones presidenciales de 2020.
Su información llevó a la inteligencia estadounidense a concluir que Putin había orquestado una interferencia en la campaña presidencial a favor de Trump, y también vinculó a Putin directamente con el pirateo de los correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata, cuya contenido embarazoso fue divulgado perjudicando la campaña de Hillary Clinton.