El expresidente boliviano Evo Morales pidió este lunes a los líderes civiles del movimiento que presionó por su renuncia, que él califica de golpe de Estado, a que "asuman su responsabilidad de pacificar el país", donde el domingo se registraron disturbios y saqueos.
"Que asuman su responsabilidad de pacificar al país y garanticen la estabilidad política y convivencia pacífica de nuestro pueblo", escribió Morales en Twitter desde la región cocalera boliviana del Chapare, en el centro del país.
"(El exmandatario Carlos) Mesa y (el líder regional de derechas Luis Fernando) Camacho, discriminadores y conspiradores, pasarán a la historia como racistas y golpistas", añadió.
Morales, que todavía cuenta con mayoría en el Congreso que elegirá a su reemplazante provisorio, aseguró que "el mundo y bolivianos patriotas repudian el golpe", tras recibir presión de militares y policías amotinados para que dimitiera.
Mientras, los ministros de Gobierno (Interior) y Defensa "están en ejercicio, pues todavía no han renunciado", según dijo Gustavo Pedraza, candidato a la vicepresidencia de la fórmula de Mesa en las elecciones anuladas de octubre pasado, a la red de televisión ATB.
Por el momento, Bolivia se encuentra sin presidente. La Constitución establece que la sucesión recae primero en el vicepresidente, luego en el titular del Senado y después en el jefe de la Cámara de Diputados, pero todos ellos renunciaron con Morales.
El expresidente, que estuvo casi 14 años en el poder, tuiteó además que la solidaridad que recibió le "dan aliento, fortaleza y energía. Me emocionaron hasta hacerme llorar. Nunca me abandonaron; nunca los abandonaré".