Lima.- El expresidente peruano Pedro Pablo Kuczynski pasó este miércoles a la unidad de cuidados intensivos de una clínica de Lima, aquejado por una alteración cardíaca que durante la noche del martes lo llevó a su internamiento.
El estado de salud de Kuczynski, quien cumple con una orden de detención preliminar durante 10 días, fue comunicado en un primer momento por el congresista Gilbert Violeta y posteriormente medios locales agregaron que presenta una "fibrilación auricular".
Según detalló el Canal N de televisión, esta enfermedad implica una frecuencia cardíaca irregular, por lo que al mediodía se le realizará una evaluación médica para determinar su estado de salud.
Se agregó que la alteración cardíaca de Kuczynski, quien tiene 80 años, habría sido provocada por la emotividad que le causó la visita de su hermano Miguel en la Prefectura de Lima, donde cumple la detención preliminar dictada por la Justicia.
Permiso para tratar su enfermedad en EU fue negado
Kuczynski, quien tiene un impedimento de salida del país desde marzo de 2018, solicitó permiso el año pasado al Poder Judicial para viajar a Estados Unidos para tratarse de su mal cardíaco en una clínica especializada, pero esa solicitud no le fue concedida, por lo que siguió el tratamiento en Lima.
Podría ingresas a prisión preventiva por lavado de dinero de Odebrecht
Un tribunal rechazó este lunes su apelación tras haber sido detenido de manera preliminar y en los próximos días puede ingresar a prisión preventiva a petición de la Fiscalía.
La Primera Sala Penal de Apelaciones Nacional Permanente Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios desestimó el recurso que interpuso el exgobernante, pero aceptó liberar a su secretaria Gloria Kisic y su chófer, José Luis Bernaola, quienes habían sido arrestados junto con él.
Los tres están imputados por supuestamente haber lavado dinero de posible origen ilegal de la constructora brasileña Odebrecht a través de consultorías a nombre de Westfield Capital, la empresa de Kuczynski registrada en Estados Unidos, cuando este era ministro del expresidente Alejandro Toledo (2001-2006).
La Fiscalía sospecha que las consultorías, que ascendieron a 782 mil dólares entre 2004 y 2007, son supuestamente unos pagos con apariencia de legalidad para obtener los favores de Kuczynski en la adjudicación de grandes obras públicas cuyas licitaciones obtuvieron mediante sobornos.
Concretamente Kuczynski está investigado por las adjudicaciones del proyecto de irrigación Olmos y la carretera interoceánica del sur, por la que Toledo recibió supuestamente 20 millones de dólares en sobornos.
En su alegato para pedir al tribunal que lo deje libre, Kuczynski reiteró su inocencia, defendió su disposición a colaborar con las investigaciones y acusó a la Fiscalía de copiar los argumentos del informe de la comisión parlamentaria Lava Jato, dirigida por la oposición fujimorista.
Los sobornos de Odebrecht
Odebrecht pagó sobornos en una docena de países de Latinoamérica, y en Perú también estuvieron acompañados de donaciones irregulares a las campañas electorales de los principales candidatos, como presuntamente ocurrió con Keiko Fujimori, quien desde noviembre está en prisión preventiva.
La revelación de los vínculos de Odebrecht con Kuczynski provocó en marzo de 2018 su salida del sillón presidencial ante la presión del fujimorismo, que también denunció una presunta compra de votos de parlamentarios para intentar evitar su destitución.