Tokio.- El expresidente de la compañía automotriz japonesa Nissan, Carlos Ghosn, fue acusado hoy de mal uso de fondos de la empresa pagados a un distribuidor en Omán, pero sus abogados solicitaron su libertad bajo fianza.
Shin Kukimoto, fiscal adjunto de la Oficina de Fiscales Públicos del Distrito de Tokio, dijo en conferencia de prensa; "hemos podido recopilar toda la evidencia que necesitamos para un veredicto de culpabilidad".
Los fiscales interrogaron repetidamente a Ghosn sobre los pagos de Nissan al distribuidor omaní, pero el expresidente aseguró que no tenía nada que decir y el interrogatorio era una pérdida de tiempo, señaló Takashi Takano, abogado defensor, indicó la agencia de noticias Kyodo.
Ghosn, con problemas de salud crónicos
Takano agregó que el equipo de defensa presentaría a la corte documentación relacionada con los problemas de salud crónicos de Ghosn al solicitar la fianza.
Por su parte, la compañía Nissan dijo este lunes que presentó una denuncia penal contra Ghosn por la última denuncia. Los pagos al distribuidor "fueron dirigidos por Ghosn para su enriquecimiento personal y no fueron necesarios desde un punto de vista comercial".
En un comunicado, el fabricante de automóviles dijo que "tal conducta indebida es completamente inaceptable y Nissan está solicitando multas apropiadamente estrictas".
Ghosn está acusado de tener una subsidiaria de Nissan en los Emiratos Árabes Unidos para pagar un total de 10 millones de dólares al distribuidor omaní, Suhail Bahwan Automobiles LLC, entre julio de 2017 y agosto de 2018.
Además de tener cinco millones de dólares de los que se transfirieron a un ahorro cuenta en Good Faith Investments, una firma de inversión libanesa que tiene Ghosn.
Fuentes cercanas al caso dijeron a Kyodo que se alega que parte del dinero transferido se canalizó a la compañía de la esposa de Ghosn, de las cuales algunas pudieron ser destinadas a la compra de un yate de lujo por valor de mil 600 millones de yenes (14 millones de dólares).
Ghosn, quien posee nacionalidad brasileña, francesa y libanesa, también ha sido acusado de una violación de confianza agravada, por separado, en relación con la supuesta transferencia de pérdidas de inversión privada a los libros de Nissan en 2008 y por pagar 14.7 millones de dólares en fondos de la compañía a un empresario saudí.
Ghosn fue destituido de los puestos de presidencia en Nissan y sus socios Renault SA y Mitsubishi Motors Corp. después de su arresto inicial en noviembre pasado.