• Macron busca dinamitar el movimiento de origen gaullista

PARíS, Francia (OEM-Informex).- En su primer acto de gobierno,el nuevo presidente de Francia, Emmanuel Macron, nombró comoprimer ministro a Edouard Philippe, alcalde de Le Havre y diputadodel partido Los Republicanos (LR) de derecha conservadora, en unaclara maniobra destinada a dinamitar el movimiento de origengaullista.

El nuevo jefe de gobierno, de 46 años, está considerado comoheredero del exprimer ministro Alain Juppé, que lidera el alamoderada de LR y se opone a la línea intransigente del partidoencarnada por el expresidente Nicolas Sarkozy.

Las fisuras que aparecieron en la estructura de LR debido a laderrota de su candidato François Fillon en la reciente elecciónpresidencial, amenazan con profundizarse en las próximos horasdebido a la posible designación de otros dirigentes de ese partidoen el gabinete que será anunciado por el Palacio del Elíseo (sedede la presidencia francesa).

En forma simultánea, al menos 24 figuras nacionales de LRfirmaron una carta abierta, apelando a su partido a aceptar “lamano tendida por el presidente de la República”.

La bomba de tiempo colocada dentro de LR con el nombramiento deun primer ministro de ese partido responde exactamente a laestrategia que definió Macron poco antes de ganar las elecciones.En una reunión de su Estado mayor, filmada durante la campaña porun equipo de televisión, se lo ve diciendo: “Nunca conseguiremosatraer al estado mayor [de LR]. Es mejor concentrarse en losdirigentes jóvenes. Yo busco desestabilizarlos abriéndole losbrazos”.

Edouard Philippe, como la mayoría de los otros dirigentesdispuestos a pasar al movimiento “macronista” La República enMarcha (LRM), pertenecen a las corrientes reformistas del gaullismoque inspiran el exprimer ministro Alain Juppé y Bruno Lemaire.

Frente la amenaza de división de la derecha, el comitépolítico de LR se reunió de urgencia para analizar la situacióncreada por la designación del primer ministro y el éxodo dedirigentes. “Es una decisión individual [de Philippe] que notiene repercusiones dentro del partido”, comentó el jefe delgrupo parlamentario, Christian Jacob, cuando aún no se conocía elllamamiento de las 24 personalidades.

El gabinete que están constituyendo Macron y su nuevo primerministro comprenderá personalidades de diversos origen político,incluyendo socialistas que estuvieron en el gobierno de FrançoisHollande, centristas de la línea que dirige François Bayrou yeventualmente algún ecologista.

La designación de Edouard Philippe no constituye una realsorpresa. Su nombre figuraba en primer lugar de la lista decandidatos a ocupar el cargo que publicó El Sol de México en suedición del 9 de mayo. También también se consideraba favorito:Macron “deberá transgredir” para tener éxito en su gestión,comentó hace algunos días. “Tiene que romper la polarizaciónantigua, cultural, institucionalizada y confortable de la divisiónderecha-izquierda para constiruir una mayoría de nuevo tipo”,teorizó en una de las crónicas que escribió durante la campañapara el diario de izquierda Libération. Para poder concretar esa“transgresión” fue preciso que Philippe creara un polo degaullistas de sensibilidad humanista y social, capaz de ocuparcargos ministeriales e integrar la futura mayoría “macronista”en el Parlamento.

En esa operación, discretamente negociada en la penumbra,contó con la bendición de Juppé, que durante toda su carrerapolítica intentó tender puentes por encima de las divisionesideológicas.

Macron y Merkel llaman a una “refundaciónhistórica de Europa”

PARÍS, Francia (OEM-Informex).- El presidente de Francia,Emmanuel Macron y la canciller alemana, Angela Merkel, secomprometieron en Berlín a realizar una “refundación históricade Europa” y a “reforzar la zona euro”.

En su primer viaje a Alemania como presidente, apenas 31 horasdespués de asumir el poder, Macron resultó sorprendido al llegara la sede de la cancillería. Varios centenares de personas loesperaban en las puertas del imponente edificio de vidrio ycemento, construido a orillas del rio Spree, para ovacionarlo ycorear consignas favorables a la amistad franco-germana. Esainesperada recepción obligó a Macron y Merkel a salir a losbalcones para saludar a la multitud.

En una primera reunión de 45 minutos, seguida de una cena,ambos dirigentes evocaron la hipótesis de “renegociar lostratados europeos si resulta necesario” y acordaron “definiruna hoja de ruta” para resolver concretamente los temas que máspreocupan a los ciudadanos, como el desempleo, impulsar lasinversiones y mejorar la coordinación en materia de políticaexterior y seguridad.

En la conferencia de prensa que ofrecieron al término de laprimera parte del diálogo, Macron propició “más pragmatismo yvoluntarismo […], menos burocracia y una Europa que proteja a susciudadanos”. Merkel, por su parte, se declaró partidaria de“crear una nueva dinámica”.   También coincidieron endefinir “normas de reciprocidad” para aplicar a las relacionescomerciales con países externos a la Unión Europea (UE), comoEstados Unidos y China. Esa decisión constituye una respuesta a lapolítica de “America first” impulsada por el presidentenorteamericano Donald Trump desde que llegó a la Casa Blanca.

Sin aceptar por completo la idea de Macron de adoptar unapolítica de “compre europeo”, que podría conspirar contra ellibre comercio, Merkel dijo: “En las relaciones comerciales veouna posibilidad de reciprocidad.

Para disipar las tradicionales resistencias de los sectorespolíticos alemanes, Macron aclaró que no era partidario demutualizar las deudas del pasado en la zona euro porque eso“conduce a una política de des-responsabilización”.