Altos funcionarios de la Casa Blanca dijeron el domingo que la amenaza del presidente Donald Trump de aplicar aranceles a los bienes mexicanos no interfiere con la finalización del pacto comercial de América del Norte, ya que el mandatario busca presionar a su vecino del sur por la inmigración ilegal.
Mick Mulvaney, jefe de gabinete interino de la Casa Blanca, dijo al canal Fox News que los aranceles "no están relacionados" con el acuerdo comercial entre México, Canadá y Estados Unidos, el T-MEC, que espera por la aprobación del Congreso estadounidense.
Mulvaney dijo que esperaba que los aranceles de 5% a los bienes mexicanos entren en vigor el 10 de junio porque "el presidente está muy determinado a resolver el asunto en la frontera sur".
En tanto, el secretario interino de Seguridad Interior, Kevin McAleenan, afirmó que los aranceles no empeorarían la situación económica de México ni llevarían a más personas a querer atravesar la frontera, sino que incentivarían al país a detener el flujo de centroamericanos que buscan entrar a Estados Unidos.
"Necesitamos que México dé la cara y haga más", dijo McAleenan a un programa de la cadena CNN. "Hay una zona en la frontera sur de México que puede controlarse. Necesitamos que lleven a sus agentes hacia allá y que eviten que las personas avancen para llegar hasta Estados Unidos", sostuvo.
McAleenan dijo que desea que México refuerce los chequeos a los inmigrantes en su frontera sur, a fin de desarmar las organizaciones que transportan a personas por el país, y que permita que más solicitantes de asilo permanezcan en suelo mexicano mientras sus pedidos son procesados por Washington.
La secretaria de Economía de México, Graciela Márquez, dijo el domingo que acordó reunirse el lunes en Washington con el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, luego de las recientes amenazas arancelarias de Trump.
El encuentro ocurrirá dos días antes de otra cita prevista por autoridades mexicanas y estadounidenses para el miércoles, también en Washington, con miras a resolver el "diferendo" causado por la advertencia de Trump de que impondrá gradualmente aranceles desde un 5% hasta el 25% a partir del 10 de junio a todos los bienes importados de México.