Los líderes del G7, reunidos en el sur de Francia, acordaron "reforzar el diálogo y la coordinación con Rusia sobre las crisis actuales", pero estimaron que era "demasiado pronto" para reintegrarla en el grupo, indicó el domingo una fuente diplomática.
Los siete dirigentes del foro, que reúne entre otros al estadounidense Donald Trump, a la alemana Angela Merkel y al francés Emmanuel Macron, adoptaron esta posición común durante una cena el sábado en Biarritz (suroeste de Francia), indicó la misma fuente.
Rusia fue excluida de lo que era el G8 en 2014, tras anexionar la península ucraniana de Crimea, en el Mar Negro, lo que nunca fue reconocido por la comunidad internacional.
Trump, cuyo país albergará en 2020 la próxima cumbre del G7, fue interrogado este domingo sobre la posibilidad de que Rusia sea entonces reintegrada. "Es algo que no sé. Pero es ciertamente posible", respondió el presidente estadounidense.
Por otro lado, el presidente estadounidense desmintió este domingo que los países del G7 hayan acordado en la cumbre en Biarritz transmitir un mensaje común a Irán, como anunció su homólogo francés Emmanuel Macron.
"No, no he discutido de eso", dijo Trump a los periodistas, contradiciendo a Macron quien declaró al canal francés LCI haber sido encargado por el G7 de llevar un "mensaje común" sobre la crisis por el programa nuclear iraní.