Ciudad de Guatemala.- El Gobierno de Guatemala dijo el jueves que solicitó el retiro de los embajadores de Suecia y Venezuela de sus cargos, acusándolos de “injerencia” en asuntos internos de Estado y aclaró que la petición no implica una declaración de “Non Grato”.
Suecia es uno de los principales donantes de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un ente respaldado por la ONU y Estados Unidos que desde el 2015 ha ayudado a enviar a prisión a decenas de funcionarios y empresarios, incluidos el expresidente Otto Pérez.
El mandatario de Guatemala, Jimmy Morales, quien ha sido atacado por acusaciones de corrupción contra miembros de su familia, ha estado en desacuerdo con la CICIG.
“Debido a que los Embajadores Anders Kompass y Elena Alicia Salcedo Poleo, en el desempeño de sus funciones han asumido actitudes que derivan en injerencia en asuntos internos del estado de Guatemala, y no acorde con la política exterior del país, se ha solicitado a los Gobiernos del reino Unido de Suecia y de la República Bolivariana de Venezuela, su retiro”, dijo en un comunicado el ministerio de Relaciones Exteriores.
Kompass fue representante de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) en el país centroamericano entre 2005 y 2009, y en octubre pasado fue nombrado por Suecia como su embajador en Guatemala.
En una conferencia de prensa posterior, la ministra de Relaciones Exteriores, Sandra Jovel, dijo que la solicitud de retiro de los embajadores no tenía nada que ver con la CICIG y que las relaciones bilaterales continúan.
“Todos saben perfectamente que, en cierto momento, el embajador Kompass llamó a toda la sociedad guatemalteca corrupta, y eso no es algo que aceptemos, ni toleraremos, porque así no es”, dijo a los periodistas. “Creo que el embajador de Venezuela también cometió algunos tipos de interferencia”, agregó.
En enero, durante una ceremonia en la que el Gobierno de Suecia donó fondos a la CICIG, Kompass hizo mención de “una sociedad corrupta”, pero agregó que “no creía que fuera correcto” decir que toda la cultura era mala. También señaló que la CICIG representaba “una medicina fuerte” para Guatemala.
Morales, un excomediante de televisión, se vio involucrado a principios de este año en una disputa con Naciones Unidas cuando la CICIG intentó acusarlo. Aunque el mandatario evitó la acusación, fracasó en un intento de expulsar al jefe de la CICIG, tras críticas de Naciones Unidas, Estados Unidos y la Unión Europea.
“La insólita decisión de solicitar el retiro del embajador Anders Kompass es una lamentable manifestación de ingratitud para con la cooperación solidaria y una acción desafortunada”, dijo más tarde en un comunicado oficial la Oficina del Procurador de Derechos Humanos.