El presidente de Francia, Emmanuel Macron, advirtió a su homólogo estadounidense, Donald Trump, que hacer una guerra "contra todos", en alusión a las disputas comerciales con China y conflictos bélicos activos, entre otros, es una opción que no funciona en el panorama político mundial.
No se puede hacer una guerra comercial con tus aliados. Es demasiado complicado. Si haces la guerra contra todos, haces la guerra comercial contra China y contra la Unión Europea, la guerra en Siria, la guerra contra Irán, vamos, no funciona. Necesitas aliados
Emmanuel Macron, presidente de Francia
"Veamos qué decide el 1 de mayo", dijo Macron, refiriéndose a la fecha límite de la negociación entre el Gobierno estadounidense y los países eximidos de la imposición de aranceles al acero y al aluminio, que anunció Trump en marzo. "Espero que no los implemente en la Unión Europea", añadió.
El líder francés hizo estas declaraciones antes de viajar a Washington mañana lunes para un encuentro de tres días con Trump, con una agenda especialmente cargada de actos protocolarios en un momento "muy fuerte de la política internacional".
Espero que mi visita a Washington sirva para resaltar la historia mutua entre ambos países, basada en los valores
La reunión bilateral supone la primera vez que Trump recibe una visita oficial de Estado desde que asumió el cargo el año pasado e incluirá una cena estatal el martes por la noche en la Casa Blanca, en la que participarán la primera dama de EU, Melania Trump, y Brigitte Macron, esposa del mandatario francés.
El líder europeo aseguró que él y Trump tienen una relación "muy especial" basándose en las veces que se han visto en persona, principalmente porque son políticos "inconformistas" y comprometidos con la lucha contra el terrorismo yihadista.
Además, señaló que tanto su llegada como la del mandatario neoyorquino a la política y sus posteriores elecciones como presidentes de Francia y EU, respectivamente, fueron "inesperadas".
Macron consideró, por otro lado, que la investigación del fiscal especial Robert Mueller, conocida como trama rusa, no ha afectado a la credibilidad internacional de Trump.