Roma.- La noticia escalofriante, es oficial y revive el ladooscuro de un trágico pasado eclesiástico. Una fosa común fuedescubierta en un ex-orfanatorio católico de la localidad deTuam, en el condado de Galway, Irlanda, con alrededor de 800cadáveres de niños, sepultados en una estructura dividida en 20secciones y que tenían una edad comprendida entre las 35 semanas ylos 3 años.
El orfanatorio fue administrado por las monjas del Instituto“Bon Secour” durante 40 años, de 1925 a 1961.
A este descubrimiento se llego gracias al trabajo realizadodurante varios años por una Comisión pública de investigación sobre las llamadas “Casas” para jóvenes madres solteras yhuérfanos del país.
Para la ministro de la infancia irlandesa, Katherine Zappone, setrata de una noticia “triste y perturbadora”, pero “noinesperada”.
En verdad, el gravísimo caso ya había sido denunciado por unhistoriador local, tras lo cual se registro indirectamente el“mea culpa” de la Iglesia católica irlandesa, pero la noticiaya es oficial. Hasta ahora teníamos solamentesospechas –dijo la ministro Zappone- pero hoy tenemos laconfirmación de que los restos están efectivamente ahí y quese remontan a la época de la ‘Casa para madres jóvenes yhuérfanos, activa en Tuam de 1925 a 1961”. Según losresultados de la investigación, otros institutos semejantes al deTuam fueron teatro de numerosos abusos en contra de quienes vivíanen esas ‘casas’, los cuales sufrieron malnutrición,enfermedades y miseria, con altísimos niveles de mortalidad.