Hamas se retira de las negociaciones con Israel para un alto al fuego

Hamas dijo que está dispuesto a retomar las negociaciones con Israel cuando el Estado hebreo muetre seriedad para concluir un acuerdo de alto el fuego

AFP

  · domingo 14 de julio de 2024

El retiro de Hamas de las negociaciones con Israel se da en el marco de un nuevo ataque a una escuela en Franja de Gaza. Foto: EFE

Hamas anunció su retiro de las negociaciones para un alto el fuego en la guerra en la Franja de Gaza, donde el ejército israelí bombardeó otra escuela que abrigaba a desplazados, la quinta en ocho días, dejando al menos 15 muertos, según la Defensa Civil del territorio palestino.

No obstante, el movimiento se dijo dispuesto a retomar las negociaciones cuando Israel "muestre seriedad para concluir un acuerdo de alto el fuego" y la liberación de los rehenes en Gaza a cambio de presos palestinos encarcelados en Israel, indicó un responsable de Hamas.

Según ese dirigente, el movimiento islamista se retiró de las negociaciones indirectas para un alto el fuego, lideradas por los países mediadores –Catar, Egipto y Estados Unidos–, y denunció las masacres israelíes contra civiles desarmados.

La decisión fue informada a los mediadores por el jefe de la oficina política de Hamas, Ismail Haniyeh, añadió.

El anuncio se produce después de que, según Hamas, bombardeos israelíes mataran el sábado a 92 palestinos en el campo de desplazados de Al Mawasi, en el sur del territorio, cerca de Jan Yunis, y a 20 personas en el campo de Al Shati en Ciudad de Gaza, en el norte, según la Defensa Civil palestina.

El domingo se reportó un nuevo ataque contra una escuela gestionada por la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) en el campamento de Nuseirat, en el centro de Gaza.

La Defensa Civil del territorio indicó que 15 personas murieron en el ataque.

Israel había indicado que el ataque del sábado apuntó contra dos altos dirigentes de Hamás, Mohamed Deif y Rafa Salama, en bombardeos realizados en la zona de Jan Yunis.

Foto: EFE

Según el ejército israelí, Deif es el jefe de la rama armada de Hamas y Salama el comandante de Hamás en Jan Yunis. Ambos fueron presentados como "dos cerebros de la masacre del 7 de octubre".

El ejército anunció que la acción del sábado mató a Rafa Salama, a quien identificó como uno de los "cómplices cercanos de Mohamed Deif".

Deif fue quien anunció en un audio difundido por Hamas el inicio del ataque la mañana del 7 de octubre y ha logrado escapar a al menos seis intentos de eliminación.

Un dirigente de Hamas afirmó que Mohamed Deif estaba vivo. "Está bien y supervisa las operaciones de las Brigadas al Qasam [el brazo armado de Hamas] y de la resistencia", declaró.

Guerra entre Israel y Hamas ha dejado una masacre

La guerra entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza se desencadenó el 7 de octubre, cuando comandos islamistas mataron a mil 195 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a 251 en el sur de Israel, según un recuento basado en datos oficiales israelíes.

El ejército israelí estima que 116 personas permanecen cautivas en Gaza, 42 de las cuales habrían muerto.

En respuesta, Israel lanzó una ofensiva que ya mató a 38 mil 584 personas en Gaza, también civiles en su mayor parte, según el Ministerio de Salud de Hamás, que gobierna el territorio palestino desde 2007.

Un responsable de la UNRWA afirmó haber asistido "a algunas de las escenas más horribles" desde que empezó la guerra durante una visita al hospital Naser de Jan Yunis.

"He visto a niños doblemente amputados, niños paralizados y sin la posibilidad de recibir tratamiento", señaló Scott Anderson, coordinador humanitario adjunto y director de Asuntos de la UNRWA en Gaza.

En unas imágenes tomadas por la AFP en el campo de Al Mawasi, aparecen restos de carpas calcinadas, mantas y trozos de colchones esparcidos por el suelo.

El movimiento islamista denunció una "terrible masacre" en ese campo, un bombardeo en el que esencialmente murieron mujeres y niños, según la Defensa Civil.

Para el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, la operación del sábado envía "un mensaje de disuasión" a los enemigos de Israel y contribuye a debilitar a Hamás.

En tanto, el ejército israelí continúa sus operaciones en la zona de Rafah, en el sur, y en Ciudad de Gaza, en el norte del enclave, donde las tropas han "eliminado a varios terroristas".

Duro golpe para las negociaciones

Tras meses de llamados internacionales a un alto el fuego, la decisión de Hamás de retirarse de las negociaciones asesta un duro golpe a los esfuerzos de los mediadores para conseguir una tregua en el territorio asediado, donde la situación humanitaria es desastrosa.

Los intentos diplomáticos habían comenzado después de que la semana pasada Hamás aceptara negociar la liberación de los rehenes en ausencia de un alto el fuego permanente con Israel, que constituía una de sus líneas rojas.

Ismail Haniyeh acusó el sábado a Netanyahu de querer bloquear un alto el fuego a través de "masacres odiosas", según un comunicado del movimiento.

"La posición israelí [...] consiste en poner obstáculos que impiden lograr un acuerdo", denunció Haniyeh.

Netanyahu insiste en continuar la guerra hasta la destrucción de Hamás, considerado una organización terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea, y lograr la liberación de todos los rehenes.