El paso de Beryl por el Caribe ya ha dejado al menos seis fallecidos, generando preocupación por la rapidez en su formación y por alcanzar la mayor potencia que puede tener un ciclón (la categoría 5) en una etapa tan temprana en la temporada de huracanes del Atlántico, algo que es visto como un "alarmante precedente".
El lunes en la noche, Beryl alcanzó la categoría 5 (la máxima en la escala Saffir-Simpson, que mide los ciclones por sus vientos) y bajó a 4 el martes por la tarde, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de EU, con sede en Miami.
Al menos tres personas murieron este martes en Granada, que se suman a un fallecido registrado el lunes en San Vicente y las Granadinas, islas del Caribe Oriental.
El primer ministro de Granada, Dickon Mitchell, dijo que "posiblemente más" personas han perdido la vida en esta isla y la vecina Carriacou.
Mitchell dijo que se están haciendo esfuerzos para conseguir un helicóptero para visitar Carriacou dado que el mar sigue muy agitado y los barcos de la Guardia Costera probablemente no puedan llegar.
El ciclón, el primero de la temporada de huracanes del Atlántico, ha dejado destrucción significativa de edificios, carreteras y embarcaciones en varios países de la Comunidad del Caribe (Caricom), que suspendió su reunión anual y convocó a una junta virtual para evaluar los daños y diseñar una respuesta colectiva.
Por otro lado, las autoridades de Venezuela reportaron este martes dos muertos, cinco desaparecidos y más de 600 viviendas afectadas en el estado Sucre, a causa del desbordamiento del río Manzanares tras el paso de Beryl.
El ministro de Relaciones Interiores, Remigio Ceballos, informó que se brindó atención médica a la población y que se desplegaron "refuerzos" con personal de bomberos y otras organizaciones de salvamento "para labores de análisis, evaluación de daños y mitigación".
Beryl, un ciclón inusual
Beryl es el primer huracán de la temporada 2024 en el Atlántico, que va desde principios de junio hasta finales de noviembre.
Los expertos afirman que es inusual que un ciclón tan potente se forme en tan temprano en la temporada.
"Sólo se han registrado cinco huracanes importantes (Categoría 3+) en el Atlántico antes de la primera semana de julio", precisó en la red X el experto Michael Lowry.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) estadounidense también pronosticó a finales de mayo una temporada extraordinaria, con la posibilidad de entre cuatro y siete huracanes de categoría 3 o más.
La agencia citó las temperaturas cálidas del océano Atlántico y las condiciones relacionadas con el fenómeno climático de La Niña en el Pacífico para explicar el aumento de las tormentas.
En los últimos años, los fenómenos meteorológicos extremos, incluidos los huracanes, se han vuelto más frecuentes y devastadores como resultado del cambio climático.