Funcionarios electorales de varios estados advirtieron que se están intensificando los esfuerzos para intimidar a los votantes y socavar la confianza pública en las elecciones de medio término del próximo martes en Estados Unidos, mientras el presidente Joe Biden se volcó a la campaña para intentar salvar a los demócratas de la derrota.
Supervisores electorales afirmaron que está en marcha una campaña de desinformación coordinada que sembró la desconfianza y la confusión sobre la votación anticipada, liderada por negacionistas del triunfo de Joe Biden los comicos presidenciales de 2020.
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Grupos de personas están presionando a los votantes para que esperen hasta el día de las elecciones para entregar su voto anticipado por correo, lo que es “una receta para el desastre”, aformó Alan Hays, supervisor electoral del condado de Lake, Florida.
También denunció que la votación anticipada total ha disminuido en comparación con las elecciones de mitad de período en 2018.
En Filadelfia, Pensilvania, consejos municipales aprobaron ordenanzas que imponen penas más severas a los intentos de intimidar a un funcionario electoral y prohíben que personas no autorizadas merodeen en los lugares de votación para entorpecer o retrasar el proceso electoral.
En este enrarecido clima electoral, Biden viajó a Nuevo México y hoy estará en California para intentar salvar a los demócratas de la derrota en las elecciones legislativas y a gubernaturas de la próxima semana, que considera decisivas para la democracia estadounidense.
Biden se esfuerza por presentarse, en este tramo final de campaña, como un presidente preocupado por las clases trabajadoras, frente a los republicanos, a los que acusa de defender a los ricos.
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