Si buscamos a profundidad, en todos los rincones del mundo existen acontecimientos que son poco fáciles de creer. Eso sucede con la historia de cómo el gobierno británico intentó combatir a los nazis envenenando vacas y en el camino dejó inhabitable una de sus propias islas.
Todo inicia cuando a finales de 1941, mientras se peleaba la Segunda guerra mundial, corrió la noticia de una posible invasión alemana y con ello, creció el miedo de que este grupo utilizara un arma biológica para la operación.
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Por lo tanto, Winston Churchill, en ese entonces primer ministro británico y defensor de las armas químicas, pidió a científicos de Porton Down que investigaran qué tipo de arma biológica podían utilizar contra los alemanes. Y solo unos meses más tarde encontraron que la bacteria del ántrax serviría para su fin.
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Operación Vegetariana: el plan para envenenar vacas
¿Cómo serviría envenenar vacas para pelear contra la invasión nazi? El plan tenía como objetivo envenenar con ántrax a todas las vacas en Alemania y a su vez, a las personas que consumieran su carne, lo que posteriormente ocasionaría una pandemia y escasez alimentaria en el país.
La idea les causó tanto interés que en 1942 dio inicio la Operación Vegetariana. Aunque al principio pensaron en bombardear Alemania con balas de heno y forraje para que las vacas se las comieran e iniciara una reacción en cadena que terminara alcanzando al ejército nazi, el plan primero debía ser puesto a prueba.
Para llevar a cabo su prueba debían encontrar un lugar donde se pudiera realizar “de manera controlada”; así fue como llegaron a la Isla Gruinard, un archipiélago de 2 kilómetros cuadrados, ubicado al noroeste de Escocia que se encontraba deshabitado. A este lugar llevaron 80 ovejas con un equipo de científicos y militares, que se encargaron de bombardear al ganado con ántrax.
Sin embargo, las cosas no salieron como esperaban. Las ovejas con ántrax murieron en tal solo tres días, y no en semanas como habían pensado, pero eso no era lo peor. Luego de quemar los cadáveres de las ovejas, enterrarlos y hacer autopsias, se dieron cuenta que también se había contaminado el suelo de la isla y se había extendido hasta la costa de Escocia.
Y como el ántrax puede permanecer durante años en la Tierra, tal como explicó la microbiologista Clare Taylor en un documental de la BBC, el acceso a la isla se prohibió en 1944 y las pruebas de lo que pasó en ese lugar se ocultaron.
¿Cómo se conoce este suceso?
Si bien las pruebas de lo que ocurrió en la Isla Guinard en 1942 intentó ocultarse, en un grupo de activistas conocido como "Dark Harvest Commandos" logró entrar a Gu 1981 llegó una carta a Gruinard, de donde tomaron muestras de tierra que enviaron a Porton Down para que fueran analizadas.
La demanda del grupo activista era descontaminar la isla. Y en 1986, cuando esta historia se hizo más conocida, el gobierno finalmente mandó un equipo de desinfección para tratar la tierra con “una solución de agua salada y el compuesto químico formaldehído”, señala BBC.
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El 24 de abril de 1990, luego de haber realizado un análisis a más muestras de tierra, el Ministerio de Defensa de Reino Unido declaró la isla libre de Ántrax.
Respecto al ataque biológico contra la población alemana, se desconocen los resultados, pero al parecer no se llevó a cabo.