El Gobierno del presidente estadounidense Joe Biden estudia la posibilidad de establecer un "teléfono rojo", como el que se usó con la Unión Soviética durante la Guerra Fría, con China para tener una línea directa de emergencia.
Aunque la idea está todavía en proyecto y aún no ha sido planteada formalmente a China, Biden quiere desarrollar una herramienta de comunicación rápida para reducir el riesgo de conflicto entre Estados Unidos y China, según publicó este jueves la CNN.
De acuerdo con las fuentes, una línea directa con Pekín permitiría a Biden, o a los altos funcionarios de su equipo de seguridad nacional, hacer inmediatamente llamadas telefónicas o enviar mensajes encriptados al presidente Xi Jinping o a sus colaboradores más cercanos.
Por ejemplo, se podría compartir información urgente sobre movimientos militares repentinos o mensajes de advertencia enviados sobre ciberataques.
La idea de establecer una línea directa con Pekín se remonta al menos a la administración de Barack Obama, aunque el concepto no se plasmó en un memorando de seguridad nacional clasificado hasta el último año de la administración Trump, según una fuente familiarizada con el mismo, agrega la cadena.
Los funcionarios de la administración de Biden han continuado con la idea, dijeron las fuentes, pero quedan numerosos detalles por resolver, incluido el hecho de que los chinos acepten la instalación del dispositivo.
Durante mucho tiempo EU ha tenido problemas para obtener respuestas rápidas de Pekín cuando se trata de asuntos urgentes, dijeron a CNN funcionarios estadounidenses, por lo que este sistema mejoraría las comunicaciones en este sentido.
La cadena precisa que ya existe una línea directa similar entre las autoridades de China y el Pentágono y, aunque se debe usar exclusivamente para asuntos militares, rara vez se le da utilidad para cualquier tema.
¿Qué es el "teléfono rojo"?
En realidad el "teléfono rojo" no es un aparato de ese color, se trata de un mito que se remonta a 1963, establecido entre EU y la Unión Soviética durante la Guerra Fría, que permitió la comunicación directa con el Kremlin como un forma de evitar una guerra nuclear.
En ese entonces el presidente de Estados Unidos, John F. Kennedy y el primer ministro de la URSS, Nikita Jruschov, decidieron instalar una línea directa entre ambos países.
A través del "teléfono rojo", se escribían mensajes breves, con el propósito de que ambos gobiernos hablaran sin malentendidos.
Con información de EFE