PARÍS, Francia.- El expresidente francés Nicolás Sarkozy fue detenido en forma provisoria sospechado de haber recibido entre 5 y 50 millones de euros del ex dictador libio Muamar Gadafi para financiar la campaña electoral que lo llevó al poder 2007.
Después de haber sido detenido en su domicilio a las 8 de la mañana, el exjefe de Estado fue trasladado a la sede de la policía judicial de Nanterre en los suburbios de París donde fue interrogado durante más de 12 horas en una causa sobre “corrupción activa y pasiva, tráfico de influencia, falsificación y utilización de documentos falsificados, abuso de confianza, blanqueo y complicidad”.
Es la primera vez que un expresidente francés es sometido a un tratamiento reservado por regla generala presuntos delincuentes.
Sarkozy, de 63 años, retirado de la política activa pero extremadamente influyente en la derecha conservadora, pasó la noche en los locales policiales.
Fuentes judiciales estimaron que volverá ser indagado durante toda la jornada de hoy (miércoles) por expertos de la Oficina Central de Lucha Contra la Corrupción y las Infracciones Financieras y Fiscales.
La comparecencia del expresidente puede prolongarse 48 horas antes de ser presentado a un juez para su eventual inculpación formal o dejado en libertad. Una figura del sistema legal francés permite a la policía poner bajo custodia al acusado para interrogarlo, pero esa medida no implica su detención formal.
En esa investigación, iniciada en 2012, numerosos testigos entre ellos tesoreros de su campaña presidencial, intermediarios y altos funcionarios del gobierno libio de la épocadenunciaron que Sarkozy recibió maletas con dinero de Gadafi, enviadas por “diversos canales”. Esa multiplicidad de “correos” impidió hasta ahora conocer el monto exacto transferido por el exdictador libio. “Se trata de sumas que oscilan entre 5 y 50 millones de euros”, estima Karl Laske coautor del libro de investigación Con los saludos del Guía.
Poco antes de la intervención militar lanzada en 2011 por una coalición internacional con el respaldo de la ONU, Gadafi declaró por televisión que “Sarkozy le debía su elección”. “Estoy defraudado. Es presidente gracias a mí. Yo le envié dinero para su campaña”, aseguró en ese video en poder de la justicia.
Además de ese caso, Sarkozy está acusado de financiación ilegal de su segunda campaña en 2012, en la cual gastó 42.8 millones de euros, casi el doble del límite legal de 22.5 millones.
Parte de esos desembolsos se ocultaron a través de un complejo sistema de facturas falsas.
Nicolás y México
A principios de marzo de 2009 las relaciones entre la Francia de Sarkozy y el México de Felipe Calderón iban viento en Popa, pero la decisión mexicana de no extraditar a Florence Cassez, condenada a 60 años por secuestro, puso fin al idilio.
La noticia le cayó como bomba al francés, que había hecho de su liberación una cruzada personal y electoral.
El punto más bajo llegó en 2011, cuando se canceló el Año de México en Francia debido a las amenazas del gobierno galo de recordar a Cassez durante los más de 300 eventos programados todo el año.