Los llamamientos a la paz en Ucrania y la Franja de Gaza acaparan la cumbre del grupo BRICS en la ciudad rusa de Kazán, que está presidida por el jefe del Kremlin, Vladímir Putin.
"La crisis ucraniana se alarga", lamentó Xi Jinping, presidente chino, en su intervención durante la reunión del plenario del grupo, parte de la cual transcurrió a puerta cerrada.
Si el conflicto ucraniano fue objeto de discusión durante los encuentros bilaterales, saltó al primer plano durante el plenario del miércoles en el que participaron los líderes de sus nueve países miembros.
Desescalada y negociaciones de paz en Ucrania
"Es necesario contribuir a una pronta desescalada en Ucrania", dijo Xi y, para ello, consideró necesario "dejar de echar leña al fuego".
Además, abogó por prevenir "los efectos secundarios debido a la expansión de las hostilidades", así como evitar acciones que contribuyan a aumentar las tensiones.
Xi, cuyo país presentó junto a Brasil un plan de arreglo de seis puntos que ya ha sido rechazado por Ucrania, abordó este asunto la víspera en su reunión con Putin.
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En la misma línea, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, defendió por videoconferencia la necesidad de "iniciar negociaciones de paz" entre rusos y ucranianos.
"Evitar una escalada e iniciar negociaciones de paz también es crucial en el conflicto entre Ucrania y Rusia", aseveró.
Al respecto, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, manifestó que muchos países presentes en la reunión en Kazán han expresado su deseo de contribuir "más activamente" a la solución del conflicto ucraniano y ser mediadores en ese proceso.
"Nosotros saludamos estos esfuerzos", aseguró Peskov.
El líder ruso señaló previamente a la India, China y Brasil como posibles mediadores en unas futuras negociaciones de paz con Ucrania.
Pronto alto el fuego en Gaza
Xi, Lula y el presidente de Irán, Masud Pezeshkian, también aprovecharon la tribuna de los BRICS para denunciar la dramática situación en Oriente Medio.
Pezeshkian, cuyo país también ha sido atacado por Israel, demandó "un alto el fuego inmediato y permanente en Palestina y el Líbano".
Además, pidió “la retirada completa de las tropas del régimen ocupante (Israel) de las zonas ocupadas y la ayuda inmediata a la población de Gaza y a los desplazados en Líbano".
Irán, enemigo declarado de Israel, es uno de los principales aliados del grupo palestino Hamás -uno de cuyos líderes mantuvo hoy consultas en Moscú- y de la milicia libanesa de Hizbulá.
Por su parte, Xi instó a "alcanzar cuanto antes el cese de hostilidades y asesinatos en Gaza y el Líbano".
"La situación humanitaria en el sector de Gaza sigue empeorando, se ha reanudado el conflicto (...), en el Líbano, donde se está agravando todo. Debemos lograr lo antes posible un alto el fuego, frenar los asesinatos", señaló.
Y llamó a lograr un arreglo "justo y sólido" para el problema palestino.
"En el momento que enfrentamos dos guerras con el potencial de volverse globales, es fundamental rescatar nuestra capacidad de trabajar juntos en pro de objetivos comunes", añadió Lula.
Putin presume de avances en el frente
Mientras, Putin informó a los líderes de BRICS de la "dinámica muy, pero muy positiva" para el Ejército ruso en los frentes de batalla de Ucrania.
"Durante las conversaciones bilaterales de ayer se habló mucho de Ucrania (...). Como regla general, la parte relacionada con la crisis ucraniana está presente en el orden del día de cada una de las reuniones", dijo hoy Peskov.
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Agregó que Putin, "por supuesto, destaca la renuencia de la parte ucraniana a celebrar cualquier negociación".
El jefe del Kremlin ha asegurado que no se sentará en la mesa de negociaciones con Kiev hasta que Rusia expulse a las tropas ucranianas de la región de Kursk.