MONTREAL. El termómetro alcanzó el domingo los 21 grados centígrados en Alert -la localidad habitada más septentrional del planeta, a menos de 900 kilómetros del Polo Norte- y estableció un "récord de calor absoluto" para el verano boreal.
"Es impresionante desde el punto de vista estadístico, es un ejemplo entre cientos y cientos de otros récords establecidos por el calentamiento global", dijo Armel Castellan, meteorólogo del Ministerio de Medio Ambiente de Canadá.
Alert, una base militar permanente establecida en el paralelo 82 fundamentalmente para la interceptación de comunicaciones rusas, ha sido sede de una estación meteorológica desde 1950.
En octubre, un histórico informe de la ONU advirtió que se está acabando el tiempo para evitar el caos climático y recomendó una transformación sin precedentes de la sociedad y la economía mundial.
El 14 de julio la base registró 21 grados y el 15 de julio 20 grados. "Es un récord absoluto, nunca lo habíamos visto", dijo Castellan.
Ayer al mediodía ya marcaba los 17 grados "y todavía puede subir", señaló. Las altas temperaturas que también se registran en el norte "son totalmente devastadoras", sobre todo porque "hemos tenido temperaturas mucho más cálidas de lo habitual durante una semana y media".
El récord anterior de 20 grados centígrados se estableció el 8 de julio de 1956, pero desde 2012 ha habido varios días con temperaturas de entre 19 y 20 grados en esta estación a orillas del Océano Ártico.
El promedio diario en Alert para un mes de julio es de 3,4 grados y la temperatura media máxima es de 6.1.
"No es exagerado hablar de una ola de calor ártica", dijo David Phillips, un climatólogo integrante de Medio Ambiente y Cambio Climático, una oficina del gobierno canadiense.
"El norte, desde Yukon hasta las islas del Ártico, registró su segunda o tercera primavera más cálida", señaló.