El primer ministro húngaro, Víktor Orbán, aterrizó en Pekín en la mañana local de este lunes, para realizar una visita que no había sido anunciada y en la que se reunirá con el presidente chino, Xi Jinping.
El mandatario húngaro publicó en su cuenta oficial en la red social X una foto de su llegada a Pekín, donde fue recibido por la vicecanciller china Hua Chunying. La foto iba acompañada de un escueto mensaje: "Misión de paz".
La Cancillería china anunció en un comunicado que el presidente húngaro se reunirá con Xi para mantener una "comunicación profunda" sobre "cuestiones de preocupación mutua", sin dar más detalles al respecto.
El pasado viernes, Orbán se reunió con el presidente de Rusia, Vladímir Putin, con quien mantuvo una "conversación franca", según la Presidencia rusa.
Considerado el líder comunitario más cercano a Moscú, el jefe del Gobierno húngaro se había entrevistado el pasado martes en Kiev con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, a quien le pidió que considere la posibilidad de negociar con Rusia un alto el fuego que permita "acelerar" las conversaciones de paz.
Hungría asumió la presidencia rotatoria de la Unión Europea a comienzos de julio.
Desde el comienzo del conflicto, China ha asumido una posición ambigua con respecto a la guerra en Ucrania, desde la cual ha pedido respeto para la integridad territorial de todos los países, incluido Ucrania, y respeto para las "legítimas preocupaciones de seguridad" de todas las partes, en referencia a Rusia.
Pekín ha condenado asimismo las sanciones unilaterales a Moscú por "no solucionar los problemas" y ha pedido repetidamente una "solución política" al conflicto.