El Papa Francisco advirtió hoy a los fieles católicos que con el diablo “no se dialoga”, al recordar las tres veces en que Jesús fue tentado, durante el rezo del Ángelus de este primer domingo de Cuaresma.
Ante los peregrinos procedentes de Italia y otros países, congregados en la Plaza de San Pedro, el Pontífice recordó el Evangelio de San Lucas, que narra las tentaciones de Jesús en el desierto, advirtiendo los peligros al ser tentados por el diablo.
Destacó que después de haber ayunado durante 40 días, Jesús fue tentado en tres ocasiones por el diablo, sin embargo, al responder al tentador, “no entra en diálogo, sino que responde a los tres desafíos con la palabra de Dios. Esto nos enseña que con el diablo no se dialoga”.
En primer lugar, explicó, el diablo invita a Jesús “a transformar una piedra en pan; luego le muestra desde lo alto los reinos de la tierra y le promete convertirse en un mesías poderoso y glorioso; por último, lo conduce hacia el lugar más alto del templo de Jerusalén y lo invita a lanzarse al vacío para manifestar de forma espectacular su poder divino”.
Las tres tentaciones, explicó el líder de la Iglesia Católica, indican tres caminos que el mundo siempre propone prometiendo grandes triunfos: “la codicia de posesiones, la gloria humana, la instrumentalización de Dios. Son tres caminos que nos perderán”, subrayó.
La primera tentación, “el camino de la codicia de posesiones. Consiste en esa lógica insidiosa del diablo. Se aprovecha de la natural y legítima necesidad de nutrirse, de vivir, de realizarse, de ser feliz, para empujarnos luego a creer que todo es posible sin Dios, incluso, contra Él”.
Pero Jesús se opone diciendo: Está escrito: No solo de pan vivirá el hombre. “Recordando el largo camino del pueblo elegido a través del desierto, Jesús afirma que quiere abandonarse con plena conciencia a la providencia del Padre, que siempre se preocupa de sus hijos”, indicó.
La segunda, añadió, es “el camino de la gloria humana. El diablo dice: “Si te postras en adoración hacia mí, todo esto será tuyo’. Se puede perder toda dignidad personal si se deja corromper por el ídolo del dinero, del éxito y del poder”. Por eso Jesús responde: Sólo ante el Señor Dios te postrarás, sólo a Él adorarás.
Por último, “la tercera tentación: instrumentalizar a Dios para obtener ventajas. Al diablo que, citando las Escrituras, lo invita a buscar de Dios un milagro impactante, Jesús responde con la firme decisión de permanecer humilde, confiado en Dios, “Está escrito: “No someterás a prueba al Señor tu Dios’”.
Así, destacó el Papa Francisco, “rechaza la que tal vez sea la tentación más sutil: la de querer poner a Dios de nuestra parte pidiéndole gracias que en realizad sólo sirven, o servirían, para satisfacer nuestro orgullo”.
Estos son los caminos que se nos han puesto delante con la ficción de poder obtener así el éxito y la felicidad. Pero, en realidad, son del todo ajenas al modo de actuar de Dios; de hecho, nos separan de Dios, porque son obra de Satanás apuntó, según un reporte de la agencia de noticias Aci Prensa.
Finalizó su enseñanza destacando que “Jesús, al hacer frente a estas pruebas, vence por tres veces la tentación para adherirse plenamente al proyecto del Padre. Y nos indica el camino para vencer la tentación: la vida interior, la fe en Dios, la certeza de su amor, la certeza de que Dios nos ama”.
Después de rezar el Ángelus, el Obispo de Roma recordó que ayer sábado en Oviedo, España, fueron proclamados beatos los seminaristas Ángel Cuartas y ocho compañeros mártires, asesinados por odio contra la fe en un tiempo de persecución religiosa.
“Estos jóvenes aspirantes al sacerdocio amaron tanto al Señor que lo siguieron en el camino de la Cruz. Que su testimonio heroico ayude a los seminaristas, a los sacerdotes y a obispos a permanecer límpidos y generosos, para servir fielmente al Señor y al pueblo santo de Dios”, subrayó.