CIUDAD DEL VATICANO.- No admitir en los seminarios a candidatos con fuerte tendencia homosexual, es más, ante la mínima duda al respecto “es mejor no dejarlos entrar”, lo dijo el papa Francisco. Se trata de palabras pronunciadas por el jefe de la Iglesia católica a los miembros de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), acerca de una delicada cuestión que Bergoglio ha ya afrontado en varias ocasiones, dando lugar a diversas y opuestas interpretaciones.
Según escribe Vaticaninsider, la agencia “on line” especializada en asuntos religiosos muy cercana a la línea de la Santa Sede, Francisco, hablando en privado con los obispos italianos de la disminución de las vocaciones, los exhortó a privilegiar la calidad de los futuros sacerdotes, más que la cantidad, refiriéndose explícitamente a los casos de personas homosexuales que por diferentes motivos desean ingresar al seminario.
En este contexto, tras invitar a los prelados italianos a un “cuidadoso discernimiento”, subrayó que “si tienen la más mínima duda, es mejor no dejarlos entrar” en el seminario.
Francisco precisó que estas tendencias, cuando están “profundamente arraigadas”, y llevan a “la práctica de actos homosexuales”, pueden poner en peligro la vida del seminario, así como la del mismo futuro sacerdote, y pueden generar esos “escándalos” que “desfiguran el rostro de la Iglesia”.
Las palabras de Francisco confirman su preocupación por los problemas registrados en seminarios donde obispos y superiores religiosos confiaron la dirección a “sacerdotes sospechosos de practicar la homosexualidad”.
Lo expresado por Bergoglio está en línea con el documento Ratio Fundamentalis publicado en diciembre de 2016 por la Congregación para el Clero, con el título El don de la vocación sacerdotal. En el párrafo 199 se lee que “....Aun respetando profundamente a las personas con estas tendencias, quienes practican la homosexualidad no pueden ser admitidos en los seminarios y en las ordenes sagradas, así como aquellos que apoyan la llamada cultura gay”.
Las expresiones de Francisco fueron dadas a conocer días más tarde de lo habitual y después de que el periodista chileno Juan Carlos Cruz, considerado una de las víctimas emblemáticas del sacerdote Fernando Karadima (un auténtico abusador serial), divulgara en una entrevista al New York Times lo que le respondió Bergoglio al confiarle sus inclinaciones sexuales en su encuentro privado en el Vaticano a fines del pasado mes de abril. O sea que Dios es quien lo hizo homosexual y que tanto Dios como el mismo Papa lo querían sin importar su orientación sexual.
Cruz, junto con James Hamilton y Andrés Murillo, otras dos víctimas de Fernando Karadima recibidas en el Vaticano, ha atacado con dureza a la jerarquía del clero chileno por encubrir y ocultar los abusos de Karadima.