El periodismo independiente de Nicaragua en el exilio vive un estado de emergencia permanente e hizo un llamado urgente a la comunidad internacional para concientizar sobre la represión sistemática del gobierno de Daniel Ortega dentro del país.
Durante un seminario digital organizado por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), un grupo de periodistas nicaragüenses refugiados en varias naciones denunció la situación denigrante que vive el gremio desde 2007, año que tomó poder el presidente, pero que se intensificaron con las protestas del 18 de abril contra las reformas al sistema de pensiones.
El grupo de periodistas alertó sobre la escalada de represión gubernamental y dan un grito a la comunidad internacional para que entiendan el nivel de censura y ataques de las que son víctimas dentro del país.
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“Es momento de cambiar el tono de informar y dar ahora un grito a la comunidad internacional para que entienda lo que se está viviendo en Nicaragua!".
Como parte de una campaña de gobierno, el periodismo independiente ha sido víctima de persecuciones, acoso y agresiones verbales y físicas. Algunas instalaciones han sido atacadas por grupos progubernamentales y han despertado el terror no solo de la comunidad periodística, sino también la civil.
El periodista Aníbal Toruño relató que varios colaboradores de Radio Darío estuvieron a punto de morir calcinados luego de la intervención militar en sus instalaciones el 20 de abril, en pleno auge de las protestas, cuando su personal fue encañonado, rociaron gasolina a las instalaciones y prendieron fuego con un mortero, lo que provocó una explosión que se escuchó a más de ocho kilómetros de distancia. “Sentí el frío de la muerte”, aseguró.
Toruño agregó que dos de los atacantes fueron asesinados en días posteriores y suponen que fue una orden del Ejecutivo.
Me siento con temor. El gobierno está en línea de batalla con los medios. Hay que estar preparados para lo peor.
El 3 de diciembre, otro equipo informativo fue intervenido por las autoridades tras un despliegue militar y policial, y allanaron la radio independiente, confiscó todo el equipo y detuvo a cuatro miembros, más tarde fueron liberados luego de ser amenazados, ahora son vigilados junto a su familia.
“Nos quitaron teléfonos celulares, computadoras y laptops, nos dijeron que trabajar en radio era un delito y que fomentábamos el terrorismo contra el gobierno”, relató.
Quieren destruirnos psicológicamente, tenemos temor a la muerte y no solo pasa a nosotros, sino todos los medios que han sido callados.
La periodista nicaragüense, Tania Amador, refugiada en Estados Unidos, insistió en que se debe escalar el tono, un tono de manera de rescate y no quedarse tranquilos desde la perspectiva internacional.
Exhortó a los medios internacionales a no dejar de transmitir la crisis para que la sociedad entienda la gravedad de la represión del gobierno sandinista.
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La SIP hizo un llamado a los gobiernos para levantar las denuncias contra el régimen de Ortega, que se ha manejado astutamente bajo la sombra de la crisis de Venezuela, porque ahora todos miran a Venezuela y han tardado en reaccionar con Nicaragua.
Insistió en mantener el camino de las sanciones, como lo ha hecho el gobierno de Estados Unidos, para que varios países vuelvan a colocar a Nicaragua en el mapa y pueda generar conciencia internacional.
A Ortega no lo detendrán las condenas o sanciones, el decidió suicidarse con todo el país.
Respecto a las sanciones, Toruño destacó que el presidente Daniel Ortega no ha puesto cuidado a las condenas y sanciones, y ha apostado por un camino en el que pretende simular que el país marcha con normalidad.
Resaltó que no se vislumbra una acción inmediata para que Ortega pueda entregar el poder, la única solución cercana la ven en el Ejército, quienes solo ellos pueden actuar y crear un muro en el avance de Ortega.
Siento dolor, me da la impresión de que Ortega llegará a las últimas consecuencias… Es un hombre lleno de irracionalidad, un hombre desbordado.
Qué hacer
El grupo de periodistas coincidieron que se necesita incrementar la solidaridad internacional, tanto de organizaciones civiles como de los medios de comunicación.
Demandaron tres puntos de apoyo para lograr este cometido:
- El primero es que los medios de comunicación de todos los países emitan una nota al día respecto a la crisis social de Nicaragua.
- Segundo, crear una plataforma SOS de prensa que funcione con rapidez para transmitir lo que sucede dentro del país.
- Y tercero, un programa de ayuda a periodistas de afuera hacia adentro, que conste de entregar equipo de trabaja, principalmente celulares y laptops para que puedas seguir ejerciendo su trabajo y que dejen de estar al alcance del gobierno.
Por último, hicieron un llamado para que se les otorgue espacios en foros internacionales para expresar y garantizar la comunicación informativa sobre el asedio sandinista.
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En una breve intervención del director ejecutivo de la SIP, Ricardo Trotti, reconoció que la situación de Nicaragua debe de tratarse a nivel global y postrarse en la agenda pública de gobiernos y organizaciones internacionales, como la Comisión Internacional de Derechos Humanos.
Trotti aprovechó para expresar su reconocimiento a la revista estadounidense Time por elegir a periodistas como Persona del Año 2018.
Durante la transmisión se dio a conocer que al Centro Nicaragüense de Derechos Humanos le fue retirada la personalidad jurídica, una decisión del gobierno que atrae consecuencias muy graves a los derechos humanos.
