SANTIAGO. El apoyo al presidente chileno, Sebastián Piñera, se desplomó a un mínimo de 14 por ciento según una encuesta de la firma Cadem, que midió la aprobación al mandatario de centroderecha durante una ola de protestas contra su gobierno y el modelo económico.
Se trató del menor nivel de aprobación arrojado por la encuesta para un gobernante en Chile desde el retorno a la democracia en 1990. El mínimo anterior lo había registrado en 2016 la expresidenta socialista Michelle Bachelet, con un 18 por ciento, también de acuerdo a Cadem.
La desaprobación al gobierno de Piñera se empinó a un 78 por ciento, según los resultados del sondeo divulgados por el diario local La Tercera .
Los manifestantes exigen la renuncia de Piñera y de su ministro del Interior, Andrés Chadwick, cuestionados por haber decretado un estado de emergencia que dejó el control del orden público en manos de los militares. La capital Santiago estuvo una semana bajo toque de queda.
Las protestas dejan 20 muertos y más de 6 mil detenidos, de acuerdo a la fiscalía, que además investiga denuncias sobre uso excesivo de la fuerza en la represión de las manifestaciones. Una misión de derechos humanos de la ONU visitará Chile esta semana para examinar estas denuncias.
Los resultados del sondeo, tomado entre miércoles y jueves de esta semana antes de una multitudinaria marcha el viernes que llevó a más de un millón de personas a las calles, se conocen mientras se espera que Piñera nombre un nuevo gabinete tras pedir el sábado la renuncia a todos sus ministros.
Piñera levantó el estado de emergencia que propició la salida de miles de militares a las calles, en momentos en que las manifestaciones se mantienen.
Miles de personas marcharon ayer rumbo a la sede del Congreso nacional en Valparaíso, a unos 120 km al oeste de Santiago, en la mayor concentración en esta región en varias décadas.
Y en el parque O'Higgins de Santiago, unas 15 mil personas -según la Policía- se congregaron pacíficamente en un acto cultural, denominado “El derecho de vivir en paz”, en alusión a una célebre canción de Víctor Jara, el folklorista asesinado por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).