La fase final del juicio político contra la presidentasuspendida de Brasil, Dilma Rousseff, comenzará el 25 de agostopróximo, informó hoy el Senado después de que la defensa de lamandataria entregó por escrito sus alegatos finales.
El abogado de la defensa, José Eduardo Cardozo, fue notificadooficialmente de la fecha una vez que presentó un grueso documento,de 673 páginas, en las que repite los mismos argumentos esgrimidoshasta ahora en favor de Rousseff, que aún no han convencido a lamayoría de los miembros del Senado de su alegada inocencia.
Básicamente, la defensa niega que Rousseff haya incurrido enlos delitos de carácter fiscal que se le achacan y atribuye elproceso a maniobras políticas que equipara a un "golpe deEstado".
Para esa fase final del juicio político instaurado el 12 demayo pasado, cuando Rousseff fue suspendida de sus funciones ysustituida en forma interina por su hasta entonces vicepresidenteMichel Temer, la defensa confirmó hoy que convocará a seistestigos.
Entre ellos, figuran funcionarios vinculados a la gestión delos presupuestos en el Gobierno de Rousseff, así como NelsonBarbosa, quien fue ministro de Planificación y de Hacienda con lamandataria.
La parte acusadora tendrá derecho al mismo número de testigos,pero según anunció esta semana solamente presentará tres, entrequienes figura el fiscal del Ministerio Público de Cuentas JúlioMarcelo de Oliveira, quien detectó las maniobras fiscales en lasque se fundamentan los cargos a los que responde Rousseff.
De acuerdo a los cálculos de la Corte Suprema, corresponsabledel proceso junto con el Senado, esa última sesión durará entretres y cinco días, al cabo de los cuales el pleno de la CámaraAlta deberá pronunciarse en votación abierta sobre la supuestaresponsabilidad de Rousseff.
Para que se apruebe la destitución, será necesaria unamayoría calificada de dos tercios (54 votos) entre los 81senadores.
Esta semana, ya el pleno del Senado se pronunció en una primeravotación sobre la continuidad del proceso, aprobada por 59 votos afavor y 21 en contra, lo cual insinúa que los favorables a ladestitución de la mandataria han consolidado la mayoríanecesaria.
Sin embargo, el resultado de la última votación del procesopudiera ser otra, si algunos de los senadores que respaldaron queel juicio político llegue a la fase definitiva cambian deopinión.
En caso de que Rousseff sea efectivamente desalojada del poder,Temer completará el mandato que vence el 1 de enero de 2019.
Sin embargo, si Rousseff fuera absuelta, recuperará el cargo yTemer debería volver a ocupar la vicepresidencia, algo que seríainviable y lo llevaría seguramente a una dimisión.