Washington, Estados Unidos.- El presidente estadounidense, Donald Trump, lanzó un nuevo ataque este jueves contra la investigación sobre la supuesta colusión de su campaña de 2016 con Rusia, una semana después de haber despedido al secretario de Justicia, levantando dudas sobre el futuro de las pesquisas.
No encontraron ninguna colusión y se han vuelto absolutamente locos. Le gritan a las personas, amenazándolas terriblemente con dar las respuestas que ellos quieren.
Son una desgracia para nuestra nación y no les importa cuántas vidas arruinan", añadió el mandatario, retomando su mentada acusación de que se trata de una "ABSOLUTA CACERÍA DE BRUJAS COMO NINGUNA OTRA EN LA HISTORIA ESTADOUNIDENSE
Los ataques del mandatario, tanto de forma como de fondo, contra la investigación del fiscal especial Robert Mueller y su equipo a cargo de la investigación de las sospechas de colusión entre la campaña electoral de Trumpy Moscú en 2016, no son nuevos.
Pero el último bombardeo verbal del inquilino de la Casa Blanca toma un nuevo significado tras haber nombrado a Matthew Whitaker, un crítico público de la investigación, como fiscal general interino en reemplazo de Jeff Sessions, despedido la semana pasada.
Esa decisión coloca a Whitaker a cargo de supervisar la investigación de Mueller.
Tras año y medio de pesquisas, una treintena de personas y entidades rusas o estadounidenses han sido inculpadas.
El líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, ha advertido que si Whitaker no se recusa de la investigación, como había hecho Sessions, su bancada buscará adjuntar una protección legal para Mueller dentro de una ley de presupuesto que se debatirá en las próximas semanas.
El miércoles, un intento del senador republicano Jeff Flake, crítico de Trump, y el senador demócrata Chris Coons, de proteger a Mueller fue bloqueado por el líder de la mayoría republicana, Mitch McConnell.