Tregua momentánea en la crisis institucional en Francia

Carlos Siula / Corresponsal

  · martes 29 de noviembre de 2016

El primer ministro, Manuel Valls, descartó la posibilidad de renunciar y excluyó un duelo con el presidente Hollande en la primaria del Partido Socialista.

PARIS, Francia. (OEM-Informex).– La crisis institucional queamenazaba la cúspide del Estado francés quedó superada, por elmomento, después que el primer ministro, Manuel Valls, descartóla posibilidad de renunciar y excluyó un duelo con el presidenteFrançois Hollande en la primaria del Partido Socialista (PS).

“En este momento preciso, en que Francia hace frente a unaamenaza terrorista, no puede haber confrontación política en elmarco de una primaria entre un Presidente de la República y unprimer ministro”, dijo Valls durante el almuerzo de dos horas quemantuvo ayer con Hollande.

En esa comida, a la cual participaron también sus respetivosjefes de Gabinete, Valls descartó la hipótesis de su renuncia,que había circulado intensamente durante el fin de semana yreafirmó que, en su condición de primer ministro, tiene un claro“sentido del Estado”.

“Esa es la concepción que tiene Manuel Valls de su papel enel marco de las instituciones y de la noción del Estado”,explicó luego uno de sus colaboradores en diálogo con laprensa.

“No puede haber y jamás habrá crisis institucional […]entre un Presidente de la República y un primer ministro”,agregó. Esa posición reproduce, casi palabra por palabra, lalínea fijada pocas horas antes por el ministro de Agricultura,Stéphane Le Foll, considerado como uno de los hombres máscercanos a Hollande: "No habrá primaria entre el Presidente de laRepública y el primer ministro. No existe y no es posibleimaginar” esa hipótesis, dijo.

Valls había dado a entender el domingo que estaba dispuesto aanunciar su candidatura a las primarias socialistas aun si debíaenfrentar a Hollande.

Poco después del almuerzo de ayer, definido como “cordial yestudioso”, Valls partió para realizar una visita oficial aTúnez, donde hizo algunas bromas con respecto a las versionessobre su renuncia: “¿Creyeron que no iba a venir? Pues, aquíestoy”, comentó con una sonrisa.

El enfrentamiento entre el jefe del Estado y el primer ministrohabía creado extrema tensión en el país, pues se trataba de unacontecimiento sin precedentes en la historia de la QuintaRepública, fundada por el general Charles de Gaulle en 1958.

El apaciguamiento entre los dos hombres se logró, al parecer,al precio de una definición clara y precisa de Hollande sobre susintenciones de presentarse a las primarias socialistas como primerpaso para postularse a la reelección en la batalla presidencialdel 23 de abril y 7 de mayo de 2017. Los observadores estánconvencidos, de manera casi unánime, de que ahora su voluntad esirrevocable. En esferas del Palacio Elíseo (sede de la Presidenciafrancesa) se asegura incluso que Hollande anunciará su candidaturael próximo domingo desde su circunscripción electoral en eldepartamento de Correze.

Tanto los estudios del electorado como los analistas políticosson pesimistas en cuanto a sus posibilidades de alcanzar amovilizar el electorado para obtener un segundo mandato.

Si bien podría imponerse en las primarias del PS con 25 porciento de intenciones de voto frente a Arnaud Montebourg (18 porciento), las perspectivas para la primera vuelta de la elecciónpresidencial son poco alentadoras.

Dos sondeos conocidos ayer prevén que el Presidente no podrállegar al balotaje (segunda vuelta electoral): según HarrisInteractiva obtendría 9 por ciento de votos, mientras que Odoxa leotorga 8 por ciento. Ambos coinciden, sin embargo, en pronosticarque ocuparía el quinto lugar detrás de François Fillón (26 porciento), Marine Le Pen (24 por ciento), Emmanuel Macron (14 porciento) y Jean-Luc Melenchon (13 por ciento).