En la víspera de su encuentro con el presidente ruso, Vladimir Putin, el presidente estadounidense Donald Trump sacudió a los aliados una vez más al etiquetar a la Unión Europea de "enemigo" con respecto al comercio.
En una entrevista con la cadena CBS News previa a la cumbre, emitida el domingo, Trump señaló que la UE junto a China y Rusia son adversarios económicos de Estados Unidos. "Creo que la Unión Europea es un enemigo, por lo que nos hacen en el comercio", señaló.
Durante la cumbre de la OTAN de la semana pasada en Bruselas, Trump criticó reiteradamente a otros países miembros por no haber gastado más en defensa y cuestionó abiertamente el propósito de la alianza.
En los últimos meses también ha sido muy crítico con la UE en términos comerciales, argumentando que sus políticas hacen las cosas más difíciles a los exportadores estadounidenses.
Después de que Trump calificó a la UE como "enemigo", Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, respondió en Twitter utilizando una de las frases comunes favoritas de Trump. "Estados Unidos y la UE son los mejores amigos", escribió Tusk. "Quien diga que somos enemigos está difundiendo noticias falsas", añadió.
Trump y sus asesores han estado trabajando durante el fin de semana para moderar las expectativas respecto a resultados tangibles de la reunión con Putin.
John Bolton, asesor de seguridad nacional de Trump, dijo en una entrevista con ABC que Estados Unidos no buscaría "resultados" y que la reunión sería "desestructurada", comenzando con una sesión cara a cara entre los dos líderes.
El embajador de Estados Unidos en Rusia, Jon Huntsman, dijo a la cadena NBC que la reunión era "un intento de ver si podemos calmar y quitar parte del drama, y francamente algo de peligro, de la relación actual".