WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, envió un mensaje a sus correligionarios del Partido Republicano: será implacable con cualquiera que apoye a la oposición demócrata y facilite la apertura de un juicio político en su contra.
El mandatario usó como chivo expiatorio a Mitt Romney, actual senador por el estado de Utah que, en las elecciones de 2012, perdió frente al expresidente Barack Obama y que, durante la campaña de 2016, se mostró muy crítico con Trump, al que llegó a tachar de “fraude”.
El viernes por la noche, en un comunicado, Romney calificó de “equivocada” y “espantosa” la polémica llamada telefónica del 25 de julio, en la que Trump pidió a su homólogo ucraniano, Vladímir Zelenski, que investigara por corrupción en Ucrania a la familia del exvicepresidente Joe Biden, aspirante demócrata para las elecciones de 2020.
Romney también criticó a Trump por haber pedido públicamente a China que investigue a la familia Biden.
La respuesta del dirigente se enfocó en insultar y burlarse de Romney, una de las pocas voces del Partido Republicano que se ha atrevido a desafiar al presidente.
Se mofó de Romney por haber perdido las elecciones de 2012 frente a Obama y consideró que hubiera podido ganar si hubiera puesto en esa campaña el mismo trabajo que ahora está invirtiendo en criticarle.
“Si Mitt hubiera trabajado así de duro con Obama, habría podido ganar. Tristemente, ¡se atragantó!”, se mofó.
“Mitt Romney nunca supo cómo ganar.
Es un imbécil pomposo que ha estado luchando en mi contra desde el principio, excepto cuando me suplicó para que respaldara su candidatura para el Senado (y yo se lo di) y cuando me suplicó para ser secretario de Estado (no se lo di)”, arremetió Trump.
Nancy Pelosi, la demócrata de mayor rango en Washington, anunció el inicio de una investigación para determinar si Trump debe ser sometido a un juicio político por sus presiones a Ucrania.
Y, desde entonces, los republicanos se enfrentan a un dilema de difícil solución y una pregunta para la que aún no tienen respuesta: ¿Hasta qué punto deben permanecer leales a Trump?
En el Senado, donde se produciría el juicio político, los demócratas son minoría y necesitan, al menos, el respaldo de 20 de los 53 senadores republicanos para poder destituir al presidente.
Escucha aquí el podcast ⬇