ESTAMBUL. Turquía anunció que está lista para lanzar una nueva operación militar contra la milicia kurda, aliada de Washington, en el norte de Siria, pese a los mensajes contradictorios de Donald Trump que alimentan la confusión sobre la posiciónde Estados Unidos.
"Todos los preparativos con vistas a una operación han sido terminados", indicó el ministerio turco de Defensa en Twitter, reforzando la idea de que una ofensiva de Ankara contra las Unidades de protección popular (YPG) es inminente.
La tensión se ha avivado en el noreste de Siria desde que la Casa Blanca anunció sorpresivamente la retirada de las tropas estadounidenses de la región.
La decisión se justificó porque Turquía se disponía a llevar a cabo "su operación prevista desde hace mucho tiempo" contra las YPG en Siria.
Sin embargo Trump, que daba la impresión de abandonar a las YPG -aliadas esenciales en la lucha contra el grupo Estado Islámico en la región- rectificó luego su posición, bajo la presión internacional y la de su propio campo republicano, y advirtió a Turquía que no "sobrepase los límites" pues en caso contrario EU "destruiría completamente" su economía.
Replicó ayer mismo el vicepresidente turco, Fuat Oktay, y afirmó que Turquía "no es un país que actúa en función de amenazas".
BOMBARDEOS
Como parte de la ofensiva, Turquía bobardeó posiciones de los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el norte de Irak, informó el ministerio de Defensa.
En los bombardeos de la aviación turca murieron 12 "terroristas separatistas", en palabras del ministerio, que define así a los miembros del PKK.
El PKK libra una violenta guerra de guerrillas contra Turquía desde 1984 y Turquía responde bombardeando regularmente la zona montañosa de Irak