Avalanchas, inundaciones y otros fenómenos climáticos extremos en este invierno (boreal) han provocado al menos 110 muertos en Pakistán y su vecino Afganistán, informaron este martes las autoridades de estos países que intentan llegar hasta personas aisladas por la nieve.
Unas 75 personas murieron y decenas resultaron heridas en Pakistán, donde hay también varios desaparecidos. En Afganistán han muerto 39 personas y hay 60 heridas, según cifras brindadas por funcionarios de ambos países.
Las previsiones meteorológicas para los próximos días son preocupantes.
La Cachemira paquistaní fue la región más afectada con 55 muertos y varios desaparecidos, según un comunicado de la Autoridad nacional de gestión de catástrofes (NDMA).
Al menos 19 personas murieron y otras 10 fueron declaradas desaparecidas en el pintoresco valle de Neelum, donde las fuertes nevadas provocaron una gran avalancha.
Raja Shahid, adjunto al responsable administrativo de este valle, vecino de la Cachemira india, por su parte informó sobre 58 muertos y 47 heridos en avalanchas, que destruyeron más de 150 casas y comercios.
La nieve también sepultó a 20 personas en la provincia de Baluchistán (suroeste), según la NDMA.
Centenares de personas se encuentran por completo aisladas. La mayor parte de las víctimas son mujeres y niños.
Las autoridades locales cerraron escuelas, mientras que varias carreteras quedaron inutilizadas en las zonas montañosas del norte, según las autoridades locales.
A lo largo de la frontera entre Afganistán y Pakistán, más de 300 casas fueron destruidas o dañadas parcialmente debido a la "ola de frío, las fuertes nevadas y lluvias que empezaron hace dos semanas" según Ahmad Tamiim Azimi, portavoz de la Autoridad nacional afgana de gestión de catástrofes (ANDMA).
En la provincia afgana de Herat, siete miembros de una misma familia fallecieron al derrumbarse el techo de su casa.
Los duros inviernos suelen causar víctimas en Afganistán, especialmente en las remotas zonas montañosas del país.