En los últimos meses Hong Kong se ha convertido en un campo de batalla, pues miles de habitantes se han estado manifestando en contra del gobierno,
Sin embargo, por primera vez arremetieron en contra de las oficinas de la agencia de noticias Xinhua, la cual destrozaron, quedaron ventanas rotas, paredes con graffitis, además de que le prendieron fuego.
Fotografías que lograron captar distintos medios de comunicación muestran un escenario lleno de violencia.
Hasta este momento no se ha detallado si es que en el lugar aún permanecían trabajadores.
A falta de la respuesta por parte del gobierno sobre la cancelación de la Ley Democrática y de Derechos Humanos, los inconformes, en un acto desesperado, han vandalizado contra bancos, empresas, las cuales consideran que tienen vínculos con Beijing.
Asimismo, los protestantes dicen que son infracciones a las libertades garantizadas cuando en 1997, Gran Bretaña regresó de Hong Kong a China.
En respuesta a estos violentos actos, policías han hecho frente a la situación de la misma manera, pues para dispersar a los manifestantes y “calmar” la tensión, disparan gases lacrimógenos y hacen uso de un cañón de agua.
Este sábado hongkoneses nuevamente invadieron las calles cantando consignas en favor de la democracia.
Ante la protesta, autoridades investigaron e informaron que era ilegal la manifestación, pues al utilizar máscaras están violando la reciente prohibición gubernamental de este objeto.
Con esta movilización ya son veintidós fines de semana consecutivos en donde los hongkoneses son protagonistas de disturbios por una causa que no ha sido atendida.
Cabe destacar que hasta ahora van más de tres mil personas detenidas.