La Unión Europea (UE) criticó este martes el plan de Estados Unidos para resolver el conflicto israelo-palestino y expresó su preocupación por la "perspectiva de anexión del Valle del Jordán y otras partes de Cisjordania", generando el rechazo de Israel.
"Nos preocupan especialmente las declaraciones sobre la perspectiva de anexión del Valle del Jordán y otras partes de Cisjordania", indicó en una declaración el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.
El responsable recordó que, "de conformidad con el derecho internacional", la UE "no reconoce la soberanía de Israel sobre los territorios ocupados desde 1967". "Los pasos hacia la anexión, si se aplican, no pueden pasar sin ser cuestionados", apuntó.
Estas declaraciones provocaron la condena del ministerio de Exteriores israelí, que cargó contra el empleo por Borrell de "un lenguaje amenazante hacia Israel, poco después de su llegada al cargo y algunos horas después de sus reuniones en Irán".
"Continuar así es el mejor modo de garantizar que el papel de la UE en todo el proceso se reducirá al mínimo", aseguró el portavoz de la cancillería, Lior Haiat.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, desveló el 28 de enero su plan para resolver el conflicto en Oriente Medio, favorable a Israel, al allanar el camino a la anexión del Valle del Jordán y de más de 130 colonias en la Cisjordania ocupada.
Washington considera además que Jerusalén es la capital "indivisible" de Israel y propone establecer como capital de un posible Estado palestino a Abu Dis, un barrio de la Ciudad Santa.
El Consejo de Seguridad de la ONU discutirá el plan a puerta cerrada el jueves, días antes de la llegada a Nueva York del presidente palestino, Mahmud Abas, que lo rechaza y reclama la aplicación del derecho internacional.
La posición de la UE, la visión internacional más extendida, es que la solución al conflicto pasa por la creación de dos Estados en base a las fronteras de 1967, cuyas capitales en ambos casos estarían en Jerusalén.