BRUSELAS. Los líderes europeos acordaron que los países de la Unión Europea (UE) puedan restringir los viajes intracomunitarios no esenciales, ante el aumento de contagios de Covid-19 por la aparición de nuevas variantes del virus, aunque se comprometieron a mantener abiertas las fronteras interiores.
La variante británica del coronavirus sigue extendiéndose y ya llegó al menos a 60 países y territorios, informó la Organización Mundial de la Salud.
➡️ Mantente informado en nuestro canal de Google Noticias
“En vista de la muy seria situación sanitaria, todos los viajes no esenciales deberían ser firmemente desaconsejados tanto dentro de cada país como a través de las fronteras”, dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al fin de una cumbre europea por videoconferencia para discutir el estado de las medidas, aunque parte de la discusión se centró en la rápida propagación de nuevas variantes de Covid-19, lo que puede resquebrajar la esperanza de que las vacunas pongan rápidamente fin a la pandemia. Con la intención de “desincentivar” los viajes no esenciales en esa zona, se podrá exigir a los ciudadanos un test negativo antes de salir y la obligatoriedad de guardar cuarentena en el país de destino.
Al respecto, Pfizer ha disminuido hasta en 50 por ciento el volumen de vacunas que entregará a la UE esta semana, dijeron autoridades, en medio de una creciente frustración por los escasos suministros que provee la farmacéutica de EU.
En este escenario, el desarrollador de la vacuna rusa Sputnik V solicitó la Agencia Europea del Medicamento (EMA) “asesoramiento científico” para “facilitar” su programa de desarrollo del fármaco y acercarlo a la legislación comunitaria, en un intento de buscar respaldo al uso de su vacuna en la Unión Europea.
La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que su país está dispuesto a ayudar a Rusia, pese a sus tensiones actuales, a desarrollar su vacuna contra el Covid-19.
La fórmula rusa poco a poco se abre camino en el mundo pese a las críticas de Occidente por la falta de información sobre su elaboración.
Una empresa brasileña comenzó ayer la producción de prueba del ingrediente activo la Sputnik V y planea alcanzar la manufactura completa en abril, lo que la convertiría en la primera inyección para la que el gigante sudamericano no dependería de las importaciones.
En Argentina, en tanto, el presidente Alberto Fernández recibió ayer la primera dosis de la vacuna rusa en un hospital al oeste del Gran Buenos Aires.