Las autoridades estadounidenses presentarán el viernes ante la justicia británica los elementos de que disponen para apoyar su solicitud de extradición del australiano Julian Assange, encarcelado en Reino Unido, afirmó el martes el redactor jefe de WikiLeaks, Kristinn Hrafnsson.
Ese día está prevista una audiencia ante el tribunal londinense de Westminster. En ese momento, "las autoridades estadounidense presentarán las pruebas que respaldan su petición de extradición", afirmó Hrafnsson en rueda de prensa en Londres.
Assange no debería estar presente en la vista y si lo está será por videoconferencia, aseguró Hrafnsson, precisando que la sesión se dedicará principalmente a cuestiones de procedimiento.
La "primera confrontación de argumentos real" entre las autoridades estadounidenses y la defensa del fundador de WikiLeaks tendrá lugar dentro de varias semanas o incluso meses, agregó.
Refugiado durante casi siete años en la embajada de Ecuador en Londres, Assange, de 47 años, fue detenido con el aval de Quito el 11 de abril por las autoridades británicas que lo juzgaron y condenaron a 50 semanas de cárcel por violación de las condiciones de su libertad provisional.
Por su parte, la justicia estadounidense lo reclama y lo ha inculpado en virtud de sus leyes antiespionaje. Estados Unidos le reprocha haber puesto en peligro algunas de sus fuentes con la publicación en 2010 por WikiLeaks de 250.000 cables diplomáticos y unos 500 mil documentos confidenciales sobre las actividades del ejército estadounidense en Irak y Afganistán.
La lectura de la acusación "es muy reveladora de la naturaleza de todo el caso", dijo Hrafnsson, quien subrayó que la legislación antiespionaje invocada por la justicia estadounidense es un "marco jurídico arcaico" que "nunca antes se ha utilizado contra un editor y un periodista".
Este caso constituye un "momento decisivo para la preservación del periodismo" y "para la libertad de prensa", insistió.
Assange, detenido en la cárcel de alta seguridad de Belmarsh, en el sudeste de Londres, fue trasladado a la unidad médica del centro debido a la preocupación por su estado de salud.
El martes, recibió la visita de su padre, John Shipton, y del artista disidente chino Ai Weiwei, según la agencia de noticias británica Press Association.