Mazatlán, Sin.- La violencia que viven regiones de Sinaloa tocó la mañana de este lunes a la alcaldesa electa de Mazatlán, Estrella Palacios Domínguez, y al alcalde de San Ignacio, Octavio Manjarrez Bastidas.
Ambos políticos, con diferencia de minutos, fueron despojados a mano armada de las camionetas en las que se desplazaban con dirección a Culiacán para una reunión con el gobernador Rubén Rocha Moya en Palacio de Gobierno.
La presidenta municipal electa del puerto, quien asumirá el cargo el 1 de noviembre, se trasladaba en una Chevrolet Tahoe color blanco, de modelo reciente, en las inmediaciones de la caseta de cobro de la autopista Mazatlán-Culiacán, que conduce a las sindicaturas Quilá y El Salado.
El hecho fue confirmado por personas que trabajan en su equipo de transición.
Palacios Domínguez, quien viajaba acompañada de su staff, quedó sobre la orilla de la carretera junto con otras personas. De eso hay registro en fotografías.
Minutos después, el alcalde de San Ignacio, Octavio Manjarrez Bastidas, también fue interceptado por un grupo armado; se desconoce si fue el mismo que lo despojó de la Chevrolet Silverado en la que viajaba.
Ambos políticos se encuentran bien y en sus respectivos municipios, reportaron sus equipos de prensa.
Desde que se incrementó el grado de violencia en regiones de la entidad por la pugna de dos facciones del Cártel de Sinaloa, la inseguridad ha trastocado la vida de los habitantes del estado.
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Incluso, los bloqueos carreteros hacia Culiacán y hacia Durango han inhibido el tránsito de turistas, principalmente hacia Mazatlán.
Las desapariciones forzadas también ha generado una sensación de inseguridad que afecta a la vida nocturna del puerto, ya que la gente prefiere resguardarse en casa temprano.
