La diputada Mariana Fernández Ramírez presentó una denuncia penal en la Fiscalía del Estado por el asalto a mano armada de la que fue víctima junto con unas 30 personas, entre los que estaban de 3 a 4 familiares del Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez. A todos les quitaron celulares, carteras, relojes y vaciaron sus bolsas.
Se trata de los familiares directos y cercanos del gobernador, quienes se reunieron para festejar el cumpleaños de una de las parientes de Enrique Alfaro.
El asalto ocurrió el sábado cuando se encontraban en una fiesta privada en una terraza por la colonia Americana, cuando a las 21:30 horas, dos personas armadas llegaron al lugar, los encañonaron y a todos y cada uno los despojaron de sus carteras, bolsos y celulares.
Minutos después, las tarjetas de crédito de varios ya presentaban cargos hasta por más de 60 mil pesos.
Fernández Ramírez señaló que no traía escolta, en sus 10 años en la vida pública nunca los ha tenido, “mi vehículo es del 2011, no soy una política que piense en traer escoltas, ni blindar vehículos”.
Tras presentar la denuncia, la Presidenta de la Bancada del PRI en el Congreso de Jalisco, manifestó que es la cuarta vez que la asaltan, en 2014 le robaron su camioneta que acababa de comprar, después suplantaron su identidad por lo que ha sufrido varios robos. “He sido víctima cuatro veces, desde que te quitan una bolsa, tu identidad, en el 2014 me quitaron mi camioneta recién comprada, era una CRV, me encañonaron también. Pero a mi familia le pasa mucho como al resto de las personas”, cita en entrevista con EL OCCIDENTAL.
El tema de los hechos está en una primera denuncia que levantó la Policía de Guadalajara como primer respondiente. Ya cada uno en lo particular interpuso su denuncia personal ante la Fiscalía del Estado.
Fernández Ramírez lamentó las declaraciones del alcalde de Guadalajara de que va a investigar a los policías, “a quien tiene que investigar es a los delincuentes, sí los malos en el Estado no son los policías, se supone que son los buenos. Quien debe actuar es el alcalde para que dejen de asaltar a todos los ciudadanos. No sabes cuándo te va a tocar, pero te va a tocar”.
Rechazó hablar con el Gobernador que es su primo o el alcalde, “Yo no necesito ningún trato preferencial, cuando asaltan a las personas no les habla el gobernador ni el alcalde, esto no es político, es la vida particular de una persona. No tengo celular ni nada”.
No pide trato preferencial, ni escoltas, sólo la seguridad que debe ser para todos los tapatíos, en lugar de aumentar los impuestos como lo hicieron con el predial, que destinen dinero para la seguridad.
“Entre el susto, el shock la policía llegó media hora a 40 minutos después, que es como llegan a cualquier robo o asalto”, puntualizó.