TULTEPEC, Méx., 12 DE Octubre.-Elementos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México buscan a un sujeto dedicado a la Santería, pues se perfila como del principal sospechoso de los asesinatos de 5 integrantes de una familia cuyos cadáveres fueron encontrados amarrados, amordazados y envueltos en bolsas de plástico , semienterrados en la zotehuela de su mismo domicilio, ya que fue la última persona que estuvo con los occisos, y no aparece por ningún lado.
Policías ministeriales informaron que de acuerdo a las primeras investigaciones que se realizaron, la última vez que los ahora occisos fueron vistos con vida, fue la noche del pasado sábado 7 de octubre, después de que salieron de su casa para trasladarse al domicilio de un amigo que se dedicaba a la santería y a prestar fuertes cantidades dinero, donde se celebraría una fiesta.
Según versiones de algunos vecinos, dijeron los ministeriales, a partir de ese momento ya no volvieron a saber nada de los integrantes de la familia Jirado Canto, únicamente alcanzaron a escuchar que llegaron a su casa durante la madrugada del domingo 8 de octubre, al parecer acompañados del Santero.
Sin embargo, como durante todo el domingo ya no se supo nada de ellos y a pesar de que sus familiares trataron de contactarlos vía telefónica y no recibieron respuesta, llevados por un mal presentimiento se trasladaron a las instalaciones del centro de justicia local para denunciar su desaparición y pedir el auxilio de elemento de la policía ministerial.
Como parte de las investigaciones que llevaban a cabo elementos de la policía ministerial para encontrar a los desaparecidos, la noche del pasado miércoles llegaron a su domicilio, ubicado sobre la calle Privada Hacienda de Tamarindos, en la colonia Hacienda del Jardín II, en este municipio y al practicar conjuntamente con el Ministerio Público y los peritos una revisión, descubrieron que en la zotehuela de la casa, en un pequeño jardín estaban semi-sepultados los desaparecidos, por lo que en ese momento el MP realizó las primeras inspecciones oculares y ordenó la exhumación de los cuerpos.
Durante las mismas inspecciones oculares que practicó en la escena del crimen, el Representante Social informó que los occisos, identificados como Hugo Alberto “N”, de 51 años de edad, su esposa Argelia “N, de 43 y sus hijos Diego Rodrigo, de 18 y las gemelas Aurora Abigail y Abril Anais, ambas de 14 años de edad estaban amarrados, amordazados, envueltos en bolsas de plástico, bien acomodados y encimados para que cupieran en el jardín.
El MP informó que al parecer desde el mismo día de su desaparición los integrantes de esta familia fueron privados de la vida, pues sus cuerpos ya presentaban un avanzado estado de descomposición, por lo que a simple vista no se pudo apreciar si fueron torturados y si su o sus verdugos les quitaron la vida a golpes, balazos o puñaladas, por lo que serán los peritos y el médico legista quienes despejen estas dudas, una vez que concluyan con los peritajes y la necropsia de ley.
Familiares de los occisos dijeron a la policía que desconocían las causas por las que estos fueron privados de la vida y quién o quiénes fueron los responsables, pues hasta donde sabían eran unas personas muy tranquilas que no se metían con nadie ni tenían enemigos.
Sin embargo, explicaron los ministeriales, por la forma en que se dieron los hechos, tienen la presunción de que los integrantes de esta familia fueron privados de la vida en una venganza, donde el principal sospechoso es el citado santero, por lo que ya hacen los trabajos necesarios para buscarlo, detenerlo y someterlo a un riguroso interrogatorio, a fin de establecer si tuvo o no responsabilidad en el múltiple asesinato y aclarar este caso o en su defecto continuar con las investigaciones correspondientes para aclararlo y detener a los posibles responsables.