El juez octavo de distrito en Morelos resolvió proceder en contra del exgobernador César Duarte Jáquez por las más de 20 órdenes de aprehensión que actualmente mantiene en su contra y que además abre la posibilidad de que las autoridades de los tres niveles de Gobierno puedan actuar en su contra.
Así lo confirmó el consejero jurídico del Gobierno del Estado, Jorge Espinoza Cortés, quien aseguró que se podrá conformar un “cerco jurídico” en el que todas las autoridades de los tres niveles de Gobierno, como la Fiscalía General de la República, del Estado, ministerios públicos y policías investigadores puedan ir tras la pista del exmandatario.
Esta decisión fue notificada a la Fiscalía General de la República y a los órganos internos de control, como a la misma Dirección General de Procedimientos Internacionales, así como a todos los organismos involucrados para poder capturar al exgobernador, ya que no podrá resguardase en los diferentes amparos que tramitó en la República Mexicana.
Esta decisión emitida por el juez es uno de los avances que se han registrado del caso contra César Duarte, ya que en lo que va de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, se han obtenido avances en materia de investigación, como es la resolución de la Suprema Corte, en la que permite a las autoridades locales investigar hasta al expresidente Enrique Peña Nieto.
César Duarte Jáquez fue considerado un prófugo de la justicia del estado de Chihuahua y México en septiembre de 2017, donde la página oficial de la dependencia estadounidense lo “fichó” como una persona prófuga de la justicia y que era buscada por el delito de peculado, acompañada de una imagen del mismo.
Dentro de las investigaciones de la Fiscalía General del Estado, César Duarte Jáquez habría cometido el desvío de aproximadamente 5 mil millones de pesos, que distrajo durante su administración como gobernador del Estado en diferentes rubros, como educación, salud y programas sociales.
Cabe mencionar que los últimos informes que recabaron del exgobernador, es que se encontraba prófugo en los Estados Unidos, principalmente en Texas y otros puntos más donde tenía viviendas y propiedades a su nombre y al de su esposa, Bertha Gómez Fong.