Estados adeudan en lucha contra violencia de género

Puebla, Estado de México, Sinaloa, Nuevo León, Oaxaca y Durango son estados considerados como peligrosos para las mujeres

  · sábado 25 de noviembre de 2017

Cientos de jóvenes, maestros y autoridades marcharon por principales vialidades de Tapachula

La conmemoración del Día Internacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres adquiere en México una relevancia especial, sobre todo en estados en donde se ha desatado una ola de maltarato y feminicidios.

Puebla, Estado de México, Sinaloa, Nuevo León, Oaxaca y Durango son estados considerados como peligrosos para las mujeres ya que las cifras de feminicidios son alarmantes, además de las prácticas de acoso físico, sicológico o verbal que en muchos casos, la sociedad ha considerado por mucho tiempo como permisibles o normales.

SINALOA, RETROCESO EN ATENCIÓN A VÍCTIMAS

Diversas instituciones feministas demandaron al Gobierno del Estado que asuma la obligación constitucional que tiene de destinar recursos financieros para la protección de las mujeres víctimas de la violencia, pues lamentaron que en Sinaloa se está retrocediendo en este rubro por la falta de un presupuesto específico y por la falta de instancias que protejan a las mujeres.

La presidenta del Colectivo de Mujeres Activas por la Paz, Teresa Guerra Ochoa, lamentó que en el presupuesto del presente año no se haya destinado un solo peso para la atención de las mujeres víctimas de la violencia, y que ahora que la Procuraduría General de Justicia del Estado pasó a ser Fiscalía General de Sinaloa, se desapareció el área de atención a las mujeres víctimas de la violencia, a quienes ahora mandan a la Secretaria General de  Gobierno para que se les atienda.

GUANAJUATO, HERIDAS SICOLÓGICAS SIN SANAR

Solo 50% de las mujeres que sufren de violencia en Irapuato terminan su tratamiento sicológico; la otra mitad no lo continúa por temor a cambiar su estado personal y sicológico.

Así lo afirmó Magdalena Benavides, coordinadora del Centro Especializado de Atención a la Violencia Familiar, quién dijo que en los últimos 10 años sólo mil 286 mujeres violentadas terminaron su tratamiento de las 15 mil 388 mujeres violentadas que fueron atendidas, entre ellas cuatro mil 145 mujeres necesitaron intervención médica, 11 mil 243 psicológica y crearon 60 grupos de ayuda, además informó que durante este año atendieron 380 mujeres en casos de violencia.

En Guanajuato, la mayor violencia que sufren las mujeres es la emocional, con más de 620 mil casos, seguida de la sexual, con 505 mil casos ocurridos en el estado; de violencia física, el Inegi reportó que 272 mil mujeres dijeron haberla sufrido.

EDOMEX: VIOLENCIA FEMINICIDA, EPIDEMIA SILENCIOSA

Los casos de Valeria y Maribel González, la primera de Nezahualcóyotl asesinada en junio de este año a bordo de una unidad de la Ruta 40, y la segunda hallada muerta en un paraje de Tenango del Valle el pasado domingo 19 de noviembre, tras desaparecer al abordar un taxi colectivo para ir a la escuela, hacen remontar la época de César Armando Librado, “El Coqueto”, operador del transporte público que se hizo asesino y fue el terror de las mujeres en el valle de México entre 2010 y 2012.

En la actualidad el transporte público es considerado uno de los más inseguros para las mujeres mexiquenses, las rutas de Ecatepec, Neza y Toluca, son el caldo de cultivo para el 70% de los delitos cometidos en unidades del servicio público.

Mariana Joselín, de 18 años de edad, fue hallada destripada al interior de una carnicería el 29 de julio de 2017 en la colonia Las Américas, Ecatepec. La joven era buscada tres días atrás luego de que no llegó a su casa cuando salió a la tienda. Aquella ocasión se supo que el responsable era un empleado del local y a quien saludaba a diario Mariana.

Karina Quiroz, otra jovencita, desapareció el 16 de septiembre de este año cuando se dirigía a su casa en la comunidad de la Concha, Ixtlahuaca. Su búsqueda duró 17 días y su cuerpo fue hallado a menos de 200 metros de su domicilio entre unas milpas. El agresor fue su exnovio, según se reveló en las últimas indagatorias sobre el caso.

El 29 de septiembre de 2017, Jesús y su esposa María Rosa vieron por última vez al agresor de su hija Adriana. Ese día se realizó la audiencia en que se le dictó sentencia por 70 años al exnovio de la joven madre, asesinada el 16 de mayo de 2016 en el cerro del Toloche en Toluca, donde fue hallada en una tumba de piedras.

OAXACA: INVESTIGAN 52 FEMINICIDIOS

Van 116 muertes violentas de mujeres, 52 de ellas son investigadas como feminicidios, y los otros son investigados con otros protocolos en Oaxaca, así lo confirmó este día el fiscal General del Estado, Rubén Vasconcelos Méndez.

“La fiscalía es la única instancia que registra los homicidios de forma oficial y verídica; la cifra negra en torno al registro de homicidios es bajísima porque todos tienen que registrarse ante esta instancia, por eso ante el gran número de cifras que hay en los medios de comunicación o en diversos espacios, yo puedo decirles que hasta hoy hay 116 mujeres que han sido víctimas de homicidio y que de esa cifra 52 cumplen con el tipo penal del feminicidio”.

Expresó que en todos estos caso se está privilegiando su persecución por eso han capturado, aprehendido o detenido a 34 feminicidas u homicidas de mujeres; destacó que también han obtenido 16 sentencias condenatorias.

DURANGO, UN ESTADO PELIGROSO

Durango ocupa la posición 8 entre las 32 entidades federativas con mayor porcentajes en los diferentes tipos de violencia de género, esto se reflejó en la encuesta ENDIREH 2016 realizada por el INEGI, que mide las problemáticas que enfrentan las mujeres en todos sus ámbitos.

LAS VICTIMAS

Valeria

El único recuerdo que tiene Valeria de su primera pareja, son los golpes que le propinaba en el rostro. Ella decidió dejarlo cuando supo que su hijo podría ser la siguiente víctima.

—No es que uno sea cobarde, sino que es difícil darse cuenta, —revela Valeria. Ahora tiene dos hijos que le dejó su primer matrimonio, se mira desgarrada y con ojos tristes, pero segura de sí misma en que reaccionó a tiempo.

Su error fue enamorarse. Se dice sobreviviente de la epidemia que se sufre en silencio al interior de los hogares en el Estado de México.

Ese error de entregarse y recibir más que amor, el dolor de puñetazos, lo cometió dos veces. Era una mujer que se ilusionaba. Ahora no.

“Con el padre de mis hijos duré más de cinco años, cuando sólo tenía a mi hijo el mayor”, cuenta Valeria.

Su historia la relata como la de cualquier jovencita que se enamora. Ella conoció al padre de sus hijos en una fiesta del pueblo, era un músico que le habló al oído y la frecuentó días después. Eso la conquistó y al año la convenció en casarse e irse a vivir con él. Después, al interior de ese hogar, apareció el infierno de la violencia.

Después de dejar al padre de sus hijos, Valeria rehízo su vida, con su segundo embarazo encima consiguió un empleo en un centro comercial del que sacaba recursos para subsistir. Pensaba dar la pelea sola, pero volvió a enamorarse. Su pareja, un gerente de la tienda, le habló de proyectos juntos y Valeria desistió.

Con el segundo hombre no hubo golpes, pero sí violencia emocional en su peor rostro, vivía sobajada económicamente y con la dignidad marchita, hasta que decidió regresar a la casa de sus padres y olvidarse del amor en su vida.

LA HISTORIA DE YADIRA

Yadira cambia constantemente los estados de su perfil en el celular. Simula ser feliz y llevar una relación amorosa. Es un protocolo para evitar que el padre de su hijo la siga acosando.

 Después de dos años de abandonarlo por los golpes que le hacían víctima cada noche, aún no se ha podido borrar la sombra de su agresor.

“Me sigue escribiendo a veces para pedirme que lo perdone, hacerse la víctima de que se suicidará por mí, pero esos juegos ya me los sé”, describe la joven madre.

El número no lo ha cambiado, porque siente que es demostrarle que huye de él por miedo. Su único temor es que le pelee a su hijo, ella abandonó su hogar golpeador porque el amor se hizo odio.